Van a traer vacunas y no hay diseñado un sistema de distribución y una logística de vacunación (se quejan los Sedes).Preocupa escuchar a personeros gubernamentales de salud algo así como: si se cumple la entrega de dosis y si funcionan los más de 4.000 establecimientos de salud del país y del sistema social, “hasta agosto todos estaremos vacunados”.

“Si sé”... dos palabras de profundo significado, porque parece que, en pocas palabras tenemos nomás que decir, que lo más seguro es “quién sabe”; el viernes, Rusia admitió que no tiene capacidad para satisfacer la demanda mundial de su vacuna Sputnik V (https://www.infobae.com/america/mundo/2021/02/18/rusia-admitio-que-no-tiene-capacidad-para-satisfacer-la-demanda-mundial-de-su-vacuna-sputnik-v/), de manera que, como ocurre en lo interno, con la condicionante (si sé), pasa afuera. Ojalá no salgan con “jueque” (fue que), que de nada va a servir.

Pero adentro, en el país, el problema es más grande todavía, el Gobierno arremetió contra las clínicas privadas al peor estilo venezolano. Sépase que sólo Venezuela hizo semejante barbaridad en el mundo y en plena pandemia – ver Gaceta Oficial de ese país publicada el 22 enero 2021 N.-42.053. Pág. 4 Resolución 001-2021 de 18 enero 2021. Debemos estar muy mal para que Venezuela sea el ejemplo de cómo hacer las cosas, cuando debería ser todo lo contrario.

Que el gobierno crea que puede solucionar problemas imponiendo precios de los servicios de salud muestra que saben muy poco lo que hacen, porque lo que en realidad están haciendo es poner en problemas al sistema de salud privado y a los pacientes que pueden acceder al mismo. En efecto, no es difícil entender que estamos frente a una consecuencia posible: que las clínicas con mayor desarrollo tecnológico y de recursos humanos, por consiguiente con más alto costo de funcionamiento, trabajarán a pérdida con el arancel fijado por el Ministerio de Salud y eso puede dar como resultado, lógicamente, que se restrinjan las atenciones a los pacientes Covid. Los perjudicados van a ser el ciudadano y el Estado; las clínicas derivarán sus pacientes al sistema público. ¿Alcanzará para todos?

Por otra parte, se sabe que la Resolución Ministerial No. 0043/27/01/2021; hecha 9 días después de Caracas, fue entregada por un funcionario policial, como si fuera un comparendo judicial; curiosamente, no la publicaron ni en la Gaceta Oficial del Estado o en algún medio de circulación nacional, de manera tal que, (como exige Ley 2341 de Proc. Adm., art 33 y 47) la misma no tiene efecto legal, por lo que se puede convertir en un “globo de ensayo” para ver reacción de los privados, pero, ya está hecha; esa es la intención.

La CPE es clara con relación al tema de salud: entre los artículos 35 y 45 se responsabiliza al Estado la atención a la salud pública y a la seguridad social y dice que controlará el ejercicio de los servicios públicos y privados de salud, y lo regulará mediante la ley. En ninguna parte se refiere a la imposición de una banda de precios al “sector privado” y, una resolución no es una ley, por lo tanto, como la CPE dice que nadie está obligado a hacer o cumplir lo que la ley no mande, debieran dejar las cosas como están, porque este horno no está para esos bollos.

Pero no termina ahí; sustituir el Código Penal de Evo Morales por la Ley de Emergencia Sanitaria, metiendo de contrabando los artículos 7 (derecho suspendido de paro y protesta), 19 (sanciones pecuniarias a los que incumplan esa ley) y 38 (Consejo estratégico centralizador) es otro problema innecesario; ya en febrero el gobierno demostró la razón del sector salud (todos los trabajadores) al aceptar revisar algunos artículos -el derecho a la protesta, contratación de médicos, etc., de manera que ahora no tiene sentido que intenten “no mostrar debilidad”, como si el asunto fuera una pulseta. Ahora tienen un paro de 10 días que apunta a indefinido (los privados se unen) y eso puede significar una derrota (nadie quiere derrotar a nadie; lo ideal fuera el consenso) porque el sector salud está no sólo con fuerza, sino, con la fuerza y la razón de su lado.

Pregunto yo: ¿qué esperan los médicos para enjuiciar al gobierno por la ausencia de condiciones adecuadas para trabajar? Hay atentado a la salud, a la vida; hay falta de insumos y equipos de bioseguridad adecuados; digo… es hora de que el que trabaja se proteja.

Es el gobierno que toca… ¿pa’ que lo va a hacer bien, si puede hacerlo mal? Miren Venezuela, no pasa nada… Maduro sigue, la fórmula parece funcionar.