Carlos Chávez, expresidente de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF), no la pasa bien. Hace unos días fue trasladado de emergencia desde Palmasola hasta la clínica Incor y en las próximas horas se definirá si será intervenido ya que presenta tumores en la pierna izquierda, problemas en los riñones, en los intestinos y daños en el nervio ciático.

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Su hermano Mario Chávez -en su momento presidente interino de Oriente-, confirmó su estado y se mostró preocupado al igual que el resto de la familia del exmandamás del fútbol nacional. Desde temprano, una gran cantidad de medios llegó hasta el lugar para conocer el estado de Carlos, que es custodiado por dos policías las 24 horas.

Chávez está sedado para evitar sentir dolores. "Hoy (miércoles) en la noche van a determinar si le realizarán la intervención quirúrgica o esperarán que se recupere un poco", informó Mario. El exdirigente sufre de anemia aguda y deshidratación, cuadro que complica la posible operación. De todas formas, hoy amaneció con mejor semblante.

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"Él presenta estos problemas hace casi un mes, pero pensó que con la atención del médico del penal era suficiente”, agregó su hermano. El exdirectivo del fútbol boliviano se encuentra internado en la clínica Incor, desde hace varios días, con la custodia policial. El médico que lo está tratando, el doctor Alfredo Romero, según Mario Chávez, ha pedido reserva.

Desde julio de 2015, Carlos Chávez se encuentra detenido en el penal de Palmasola acusado de corrupción, y es posible que en enero vuelva a encarar el juicio buscando su liberación. Su abogado, Luis Alberto Morales, dijo que solicitará que Carlos se mantenga en la Incor hasta cuando esté plenamente recuperado.

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En declaraciones al periodista Julio Lozada de DIEZ Radio, Morales sostuvo que no sería conveniente que Chávez sea atendido por los médicos del penal cuando presente una mejoría. Para él lo ideal es que abandone la Incor cuando esté plenamente recuperado de sus problemas.

En las últimas horas, Chávez fue acusado por el argentino Santiago Peña -ejecutivo de Full Play- que encara un juicio en su país por el FIFA Gate, de que Chávez era llamado 'VW' en la distribución de coimas para obtener los derechos de televisión cuyos dueños eran los hermanos Jinkis. Ante esta situación, Mario Chávez dijo que  lo que menos les interesa en estos momentos son los problemas externos, ya que toda la familia está centrada en la recuperación plena de Carlos, que fue ingresado con un cuadro delicado.