Guabirá tuvo un primer tiempo de ensueño y terminó venciendo a Blooming por 4-2, la noche de este viernes, en el inicio de la fecha 13 del torneo Clausura de la División Profesional del fútbol boliviano. El encuentro se llevó a cabo en el estadio Gilberto Parada de Montero.

Los azucareros tuvieron un inicio arrollador, porque cuando se jugaba apenas un minuto y 46 segundos abrió el marcador a través de Gustavo Peredo, quien conectó de zurda un pase retrasado de Ronaldo Vásquez. La jugada la había iniciado Alejandro Quintana.

En el siguiente ataque de los rojos se volvieron a juntar Vásquez, Peredo y esta vez el que definió con una especie de tijera fue Quintana, quien dejó sin chance al arquero Brasulio Uraezaña. Transcurrían solo 7 minutos y Guabirá ya ganaba por 2-0.

El repertorio del equipo montereño continuaba, tenía más para ofrecer. Pedro Cabral (18’) se encargó de convertir el tercero tras quedar con el arco a disposición luego de un remate de Vásquez, que se estrelló en el poste izquierdo del arco defendido por Uraezaña.

Los celestes no lo podían creer, estaban desconcertados, pero trataron de reaccionar y Moisés Villarroel (22’) estuvo a punto de lograr el descuento con un zurdazo desde fuera del área que pegó en el ángulo superior derecho de la portaría del guardameta local Manuel Ferrel.

Los locales se paseaban en el Gilberto Parada, por eso no sorprendió que los goles sigan llegando con Vásquez y Quintana de protagonistas. El dominicano mandó el centro al área y ahí estuvo oportuno el argentino para cambiar la trayectoria al balón y mandarlo a la red. Corría media hora de juego y Guabirá ya ganaba por goleada.

La jugada fue revisada por el VAR, porque se sospechó una posición adelantada de Quintana, pero rápidamente el árbitro paceño Guildo Quenta fue comunicado de que la jugada fue licita.

A esas alturas el DT de Blooming, Carlos Bustos, ya había realizado su primer cambio sacando a Miguel Becerra y poniendo en su lugar a Richard Spenhay.

Los azucareros acariciaron el quinto con un disparo de tiro libre de Julio Herrera (33’) que fue a dar en el travesaño. Blooming no ofrecía resistencia y era presa fácil para Guabirá.

Cuando comenzaba a jugarse tiempo adicionado, Juan Carlos Arce cobró un tiro libre que tenía destino de red, pero el arquero Ferrel, con mucho esfuerzo, sacó la pelota prácticamente de la línea de sentencia.

En el segundo tiempo, la visita mejoró notoriamente, incluso llegó a apoderarse de la pelota por varios minutos, pero no podía llegar al descuento. El que más cerca estuvo de anotar fue nuevamente Quintana (59), con un remate bajo que logró contener Uraezaña.

Los pupilos de Carlos Bustos llegaron al descuento con un gol de Samuel Garzón (69’), en una jugada en la que él inventó todo. Le robó la pelota a Leandro Zaspe y ante la salida de Ferrel definió con categoría para convertir el del honor.

Garzón había ingresado solo dos minutos antes de marcar ese gol, en reemplazo de Moisés Villarroel, y se convirtió en el jugador más peligroso de Blooming, porque a los 80’ se hizo presente en el marcador por segunda vez con un disparo de zurda bajo, que hizo ilusionar a los celestes.

Los siguientes minutos tuvieron a la academia como protagonista, porque se volcó al ataque buscando más goles, pero no cumplió su objetivo y terminó pagando caro los errores cometidos en la primera mitad.

Con este resultado, Guabirá dejó el penúltimo lugar de la tabla de posiciones en desmedro de Royal Pari, mientras que Blooming no solo perdió el partido, sino que también desperdició una gran oportunidad de alcanzar a Bolívar en el primer lugar.

Los detalles...