La IFAB (International Football Association Board), órgano que se encarga de regir las reglas del fútbol mundial, tiene en mente implementar una tarjeta azul.
Esta nueva tarjeta se ocupará de castigar el ‘corte’ de un ataque prometedor (pero que no sea suficiente para ser roja) o las protestas excesivas hacia un árbitro. Esto supondrá la expulsión del futbolista durante 10 minutos.
Cumplido este tiempo el jugador podrá retornar al terreno de juego.
Lo particular que tiene esta tarjeta es que dos azules equivalen a una roja. Esto significa, la expulsión del partido completo y la suspensión para el próximo.
El mismo resultado se dará en caso de combine un tarjeta azul con otra amarilla.
Según la IFAB esta nueva tarjeta se introducirá de forma gradual. La Federación Ingelsa de Fútbol se ha prestado como voluntaria para que la cartulina azul se ocupe en sus competiciones.
En caso de confirme esta implementación, será la primera vez que se modifique el sistema de tarjetas en el fútbol desde que en la Copa del Mundo de 1970 se estrenaron las tarjetas amarillas y rojas.