Luis Haquin será el primer legionario en sumarse a la concentración de la selección boliviana, que arrancó su preparación el jueves en la ciudad de La Paz con la mira puesta en la doble fecha de Eliminatorias Sudamericanas de octubre. Está programado que el defensor y capitán de la Verde arribe a la sede de Gobierno el viernes por la noche.
La llegada prematura de Haquín a la selección se da gracias a las gestiones que realizó la Federación Boliviana de Fútbol con sus pares del Ponte Preta, club brasileño en el que milita el boliviano y donde no es tomado en cuenta para un partido oficial desde el 26 de mayo.
La principal preocupación del cuerpo técnico de la selección, a la cabeza de Óscar Villegas, pasa por la falta de ritmo de Haquin. Sin embargo, el preparador físico de la Verde, Maximiliano Alonso, afirmó que el jugador ha estado trabajando arduamente en la parte física y que está en forma.
"Lo de Luis es un caso particular, pero vale destacar que es un muy buen profesional. Está trabajando no solamente con el club Ponte Preta, sino que tiene un preparador físico con el que trabaja por las tardes, un nutricionista y un psicólogo personal", indicó Alonso.
Asimismo, Alonso aseguró que el cuerpo técnico de la selección ha estado trabajando en conjunto con el equipo multidisciplinario de Haquin. "Hemos mantenido contacto con Luis y su equipo, y como vieron en los últimos partidos frente a Venezuela y Chile, llegó en óptimas condiciones. Estas dos semanas que estuvo en Brasil ha trabajado de la manera que he comentado, pero siempre respetando las cargas y siempre pensando en lo que necesitamos para la selección", sentenció.
Después de Haquin, quedan siete jugadores legionarios que deberán arribar al país en los próximos días para unirse a la Verde: Miguel Terceros, Enzo Monteiro, Gabriel Villamil, Adalid Terrazas, Carmelo Algarañaz, Lucas Chávez y Roberto Carlos Fernández.