Un hecho curioso se dio el sábado en el partido del Getafe contra el Real Madrid. Como los albos no podían romper el empate que se estaba dando, Luka Modric reaccionó inesperadamente pidiéndole a su compañero Isco que calentara.

El hecho no pasó desapercibido para las cámaras. Modric terminó acertando en su decisión, ya que poco después Zidane lo mandó a la cancha e Isco terminó dando el pase para que Cristiano Ronaldo lograra el 1-2 definitivo.