Always Ready hizo respetar su casa y venció por 5-2 a Real Santa Cruz, equipo que con anticipación perdió la categoría y al año jugará en la Asociación Cruceña de Fútbol (ACF). El partido de la fecha 28 del torneo Clausura de la División Profesional del fútbol boliviano, se disputó la tarde de este sábado.

El partido comenzó con casi 15 minutos de retraso, debido a que la delegación del club albo viajó por tierra desde Santa Cruz hasta la ciudad de El Alto y llegó sobre el límite al estadio Municipal de Villa Ingenio, donde se disputó el encuentro.

Apenas iniciadas las acciones, al minuto y medio de juego, los millonarios abrieron el marcador a través de José Miguel Briceño, quien con un disparo a media fuerza, pero bien ubicado, descolocó al arquero Omar Ledezma. La jugada nació en un tiro de esquina, que la defensa visitante no supo despejar.

Lo mejor del visitante en este primer periodo fue un remate de zurda y de larga distancia de Jhonathan Caicedo (24’), exigiendo al arquero Alaín Baroja, que dio un rebote, pero nadie llegó para concretar.

A la media hora de partido, Robson Matheus inició una jugada en la que Moisés Paniagua quedó mano a mano con el arquero Ledezma, quien salió victorioso, pues evitó el gol del equipo alteño.

Tres minutos después, la historia se repitió. Ledezma salió airoso en una jugada en la que Briceño quedó con el arco a disposición, pero el arquero cruceño se agrandó una vez más.

En la recta final del primer tiempo llegó la seguidilla de goles. Héctor Cuéllar (40’) con remate cruzado estiró la diferencia, pero un minuto más tarde, Johan Sebastián Castillo (41’) aprovechó un rebote para poner el descuento.

Eso no fue todo, porque Briceño (43’) nuevamente se hizo presente en el marcador luego de una asistencia como con la mano de Alfredo Alanoca.

Real Santa Cruz fue dirigido por Armando Ibáñez, que el miércoles había renunciado a la dirección técnica luego de la derrota ante Blooming, pero a pedido de la dirigencia, decidió retornar al cargo.

En el segundo periodo, Always Ready siguió sumando goles. Briceño (51’) estaba en su tarde y esta vez puso el 4-1 con un cabezazo esquinado, al que el portero Ledezma no pudo llegar.

El quinto tanto fue parecido al anterior. Centro desde la derecha y en el área apareció Carlos Alberto Lucumí (64’), que le pegó con el pie derecho para enviar la pelota a la red.

La visita volvió a acortar la diferencia con un cañonazo de larga distancia de Imanol Cárdenas (75’), que dobló las manos del arquero Baroja, quien sacó la pelota cuando ya había traspuesto la línea de gol y para asegurar el tanto Brayan Moreno la metió en el arco, aunque el gol ya había sido asignado a Cárdenas.

El partido no tuvo intensidad, pero hubo muchos goles y el pitazo final del árbitro orureño Gery Vargas dejó las cosas 5-2.

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