El esperado live-action de Blancanieves, inicialmente programado para marzo de 2024, ha sido pospuesto hasta 2025. Este retraso ha aumentado la expectación entre los seguidores, pero también ha sido motivo de diversas controversias desde el anuncio de su elenco y algunos cambios significativos en la historia original. La producción, dirigida por Marc Webb, estará protagonizada por Rachel Zegler (West Side Story) como Blancanieves y Gal Gadot como la Reina Malvada.

El proyecto ha generado polémica, especialmente en torno a las críticas de Zegler hacia la versión animada de 1937. La actriz expresó su desacuerdo con algunas de las ideas que se presentaban en la cinta clásica, lo que ha causado reacciones mixtas en las redes sociales. A pesar de las críticas, Zegler mantiene su postura, mencionando que la representación de las princesas ha cambiado a lo largo de los años. En una entrevista con Variety, Zegler comentó cómo de niña fue capaz de aceptar diferentes versiones de Cenicienta, haciendo referencia a la diversidad en las adaptaciones, como la protagonizada por Brandy Norwood en 1997.

Además, uno de los cambios más notables en esta nueva versión de Blancanieves es el origen de su nombre. En lugar de hacer referencia a su piel clara, se ha introducido una nueva narrativa en la que Blancanieves recibe su nombre tras sobrevivir a una tormenta de nieve cuando era un bebé, destacando así su fortaleza y resistencia. Zegler señaló que uno de los mensajes principales de la película será inspirar a las jóvenes a reconocer su propia fuerza interior.

Con un guion escrito por Greta Gerwig, la directora de la aclamada Barbie, la nueva versión de Blancanieves pretende ofrecer una interpretación fresca y moderna de este clásico cuento de hadas. Los fans tendrán que esperar hasta marzo de 2025 para ver cómo se materializan estos cambios en la pantalla grande.

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