"Godzilla Minus One" se alzó con el Oscar a los mejores efectos visuales, superando a grandes producciones de Hollywood como "Guardianes de la galaxia Vol. 3", "Misión: Imposible Sentencia Mortal Parte 1", "Napoleón" y "Resistencia". Este logro marcó un hito en la historia del cine japonés. Es la primera vez que una película de este país obtiene este galardón en dicha categoría, según reportes de medios especializados en cine.

Setenta años después del estreno de la película original, "Godzilla Minus One" devuelve al icónico monstruo a sus raíces, sirviendo como una metáfora del dolor y la ansiedad de la posguerra en Japón. 

La trama se desarrolla al final de la Segunda Guerra Mundial, cuando Koichi, un joven piloto kamikaze interpretado por Ryunosuke Kamiki, enfrenta su deseo de redimirse después de evitar su misión suicida. La historia sigue a Koichi mientras se cruza con Noriko, una joven que cuida a una bebé huérfana tras un ataque de Godzilla.

El director Takashi Yamazaki, proveniente del ámbito de los efectos visuales, supervisó de cerca el trabajo técnico de la película, lo que contribuyó a su éxito en la categoría de efectos visuales, según TMZ.

Con una recaudación mundial que supera los 115 millones de dólares, "Godzilla Minus One" demostró ser un monstruo no solo en la pantalla, sino también en la taquilla. La película ya está disponible en Netflix para quienes deseen experimentar esta superproducción nipona desde la comodidad de su hogar.

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