Durante un viaje a las comunidades del Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro-Sécure (Tipnis) para entregar víveres, Maikol Melgar Pareja, director del Servicio Nacional de Áreas Protegidas (Sernap) tuvo un sorprendente hallazgo: Se topó con fósiles de animales marinos.

 “Mientras viajábamos por el Tipnis, entre las rocas del camino pude observar unos fósiles en la zona”, manifestó Melgar. 

De manera inmediata, se contactó con la directora del Museo de Historia Natural Noel Kempff Mercado, Marisol Toledo, con el fin de obtener información del hallazgo. 

Gracias a su equipo de científicos, entre ellos Mario Suárez Riglos y José Luis Ortiz, se determinó que se trata de fósiles braquiópodos, que pertenecen al grupo de los espiriféridos, señala un comunicado de prensa.

Según datos del Club Paleontólogo Boliviano, los braquiópodos son animales marinos de cuerpo no segmentado y alojado en una concha provista de dos valvas, similar a los moluscos. En Bolivia los braquiópodos son abundantes en rocas pertenecientes a la Era Paleozoica, en la actualidad, sobreviven muy pocos grupos.

Melgar, destacó que este hallazgo abre las puertas a la investigación científica en el Tipnis, ya que existen restos fósiles de hace millones de años, que serían nuevos registros de esa región.