Tras una reunión con autoridades y técnicos de Achocalla, el alcalde de La Paz, Iván Arias, aseguró que ninguno de los dos municipios había autorizado a la Inmobiliaria Kantutani S.A. para que haga el movimiento de tierras en la zona Bajo Llojeta de la sede de Gobierno.
“Ni Achocalla ni La Paz hemos dado permiso para ese asunto”, dijo Arias, aunque en un principio se presumía que Achocalla hubiera autorizado a la empresa realizar movimientos de tierras para el Cementerio Los Andes.
Sin embargo, la cuestionada inmobiliaria negó el lunes ser la responsable de la tragedia en Bajo Llojeta, donde, el pasado 23 de noviembre, una mazamorra afectó a unas 40 viviendas e incluso dejó una niña fallecida.
“Aclaramos que los sucesos que afectaron la zona de Llojeta fueron generados por el taponamiento del embovedado en el río Pasajahuira, que se encuentra a 1.5 km del Cementerio Los Andes y no fueron producto de los movimientos de tierra realizados para la estabilización de nuestro Parque Cementerio”, cita un comunicado de la inmobiliaria.
La empresa asegura que realizó “verificaciones técnicas que respaldan esta información y que se darán a conocer en el menor tiempo posible para evitar malentendidos y especulaciones tendenciosas”.
Pero, el alcalde Arias señaló que la primera constatación es que las autoridades de Achocalla “no han dado” el permiso.
“Más bien, igual que nosotros, tienen observaciones. Le hicieron observaciones a la empresa de que no puede mover (tierra), al igual que nosotros lo hicimos y la empresa hizo caso omiso”, afirmó la autoridad local citado en una nota informativa del Municipio.
Entretanto, la Fiscalía empezó a investigar el hecho de oficio para establecder las responsabilidades y alista las primeras citaciones.
El Ministerio Público investigará las causas del desastre en la zona de Bajo Llojeta en La Paz. El alcalde Arias presentó una demanda contra una empresa. El municipio de Achocalla negó responsabilidades. Se encontró el cuerpo de una niña.