El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y su vicepresidenta y aspirante a sucederlo, Kamala Harris, expresaron este miércoles su miedo por la amenaza que supone para la democracia el candidato republicano Donald Trump, sea cual sea el resultado de las elecciones de noviembre. 


"Si Trump pierde, no estoy nada seguro" de que haya una transición pacífica del poder, respondió el líder demócrata en la cadena de televisión CBS a una pregunta sobre el tema. 


"Lo dice en serio... todo eso de 'si perdemos habrá un baño de sangre'", expresó el mandatario en un extracto emitido el miércoles de una entrevista con la cadena CBS.


La entrevista, de la que se publicó un extracto el miércoles y que se emitirá íntegra el domingo, es la primera del presidente, de 81 años, desde que renunció a optar a un segundo mandato el pasado 21 de julio.


Trump nunca ha reconocido su derrota de 2020 frente a Biden. El republicano se enfrentó a dos procesos de destitución, tiene dos acusaciones penales por intentar revertir los resultados de esas elecciones, una por su papel en el asalto al Capitolio el 6 de enero de 2021, y ha sido condenado penalmente por tratar de ocultar pagos a una exactriz porno de cara a la campaña de 2016. 


Mientras Biden teme la violencia en caso de derrota de Trump el 5 de noviembre, su vicepresidenta y candidata demócrata ha advertido de las consecuencias en caso de victoria del multimillonario.


"Dictador"

Harris celebró un acto de campaña el miércoles en Eua Claire, en Wisconsin, uno de los estados considerados cruciales para conseguir la victoria en las presidenciales. 


"(Trump) prometió a todos que, reelegido, sería dictador desde el día uno, que instrumentalizaría la Justicia contra sus enemigos políticos (...) e incluso, cito, 'aboliría la Constitución'", recordó la demócrata. 


"Alguien que sugiere abolir la Constitución no debería nunca más tener la oportunidad de estar detrás de la rúbrica de Presidente de Estados Unidos", dijo Harris entre los aplausos de sus seguidores.


Acompañada de su fórmula a la Casa Blanca -el gobernador del estado de Minnesota, Tim Walz- Harris intenta formar una coalición con indecisos, independientes y hasta republicanos descontentos con su rival.


Con los sondeos a favor, la vicepresidenta, de 59 años, quiere aprovechar el impulso y la dinámica generados a finales de julio en un espectacular giro de la campaña cuando sustituyó al mandatario Joe Biden como abanderada del Partido Demócrata de cara a las elecciones del 5 de noviembre.

Solo tres meses

"El impulso de la vicepresidenta Kamala Harris y el gobernador Tim Walz en los estados en disputa, incluido el Muro Azul, es real y se exhibirá plenamente hoy", dijo Dan Kanninen, director de la campaña de Harris para esos estados.


Está previsto que Walz, de 60 años, un exprofesor y oficial retirado de la Guardia Nacional del Ejército, y gobernador de Minnesota desde 2019, aparezca junto a Harris en cada uno de los estados indecisos, con paradas en Arizona y Nevada el fin de semana. 


Muchos republicanos prominentes se mostraron satisfechos por la elección de Walz en vez del gobernador de Pensilvania, Josh Shapiro, inmensamente popular en un estado que la mayoría de los expertos coinciden en que será la máxima conquista en 2024.


Los republicanos tachan a Walz de idealista de extrema izquierda que ofreció beneficios a los inmigrantes indocumentados y toleró disturbios en las calles de la ciudad de Minneapolis en 2020, tras el asesinato de George Floyd, un hombre negro asfixiado por un agente blanco en un cuestionado operativo policial.


No está claro cuán efectivos serán los ataques, ya que el propio Trump reconoció en una entrevista reciente que "el vicepresidente -en términos de la elección- no tiene ningún impacto..... La elección de un vicepresidente no marca ninguna diferencia". 


El expresidente (2017-2021) de 78 años no se centra en las debilidades políticas de Harris, sino en ataques personales que fueron en gran medida ineficaces para frenar su ascenso.


Harris aventaja a Trump por 51% a 48% según la última encuesta de NPR/PBS News/Marist y en 0,5 puntos porcentuales en el promedio nacional de sondeos de RealClearPolitics. 


Hace 17 días, cuando Biden se retiró de la campaña de reelección y designó a Harris, Trump aventajaba al presidente en tres puntos.


Trump, que solía ser famoso por su habilidad para definir a sus oponentes con un incisivo apodo de una sola palabra -como "deshonesta" para Hillary Clinton o "mentiroso" a Ted Cruz-, ahora le ha costado encontrarle uno a Harris. 


Su última burla -llamarla "Kamabla"- parece más una errata que un insulto y ha dejado a los expertos devanándose los sesos.

Lea también

BBC

Quién es Tim Walz, el antiguo profesor y exentrenador de fútbol americano elegido por Kamala Harris como candidato a vicepresidente

El gobernador de Minnesota, de 60 años, era prácticamente un desconocido fuera de su estado hasta hace dos semanas, cuando describió a Trump y su aspirante a vicepresidente Vance como "gente rara".