La Comisaria Europea de Salud, Stella Kyriakides, pidió este miércoles "acabar con el estigma de la salud mental, que sigue siendo muy común en toda Europa y en toda la sociedad".

En la víspera del Día Mundial de la Salud Mental, Kyriakides señaló que "demasiado frecuentemente, las personas que viven con problemas de salud mental se enfrentan a la incomprensión, al rechazo y al aislamiento" y dijo que "abordar este problema es la clave para construir sociedades más saludables e inclusivas".

"La salud mental es importante en cualquier contexto, especialmente en el lugar de trabajo, donde la gente pasa una cantidad importante de su tiempo", advirtió Kyriakides.

Precisamente, la jornada internacional de mañana quiere poner el acento en la importancia que la salud mental tiene en los centros de trabajo. Un ámbito en el que el 27 % de los ciudadanos de la Unión Europea afirman que sufren estrés, depresión o ansiedad, según la Agencia Europea para la Seguridad y la Salud en el Trabajo.

"Estamos comprometidos a crear entornos de trabajo más seguros y saludables donde todos tengan los recursos y el apoyo para cuidar su salud mental", aseguró la comisaria.

El objetivo de mejorar la salud mental, continuó Kyriakides, es el de "promover la dignidad, la equidad y la compasión para todos, permitiendo que cada uno juegue su sol en la sociedad".

El pasado mes de junio la Comisión Europea anunció que destinará 1.230 millones de euros para ayudar a los Estados miembros a mejorar la salud mental de sus ciudadanos, un problema que afecta a una de cada seis personas en la Unión Europea y que tiene un coste que Bruselas cifra en 600.000 millones de euros al año. EFE

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