El desempleo en Chile volvió a subir en el trimestre móvil de diciembre-febrero y se situó en 7,8%, como consecuencia de una menor actividad económica debido a la crisis social, sin considerar todavía los efectos del coronavirus.
De esa manera, la tasa de desocupación nacional se incrementó 0,8 puntos porcentuales (pp) respecto al mismo periodo un año antes y 0,4 pp respecto al trimestre inmediatamente anterior, de acuerdo a un reporte del Instituto Nacional de Estadísticas (INE).
El resultado, que considera los efectos del estallido social que se inició el 18 de octubre, "se debió al crecimiento de 2,6% de la fuerza de trabajo (que considera a ocupados y desocupados), mayor al registrado por los ocupados (1,7%)", según explicó el INE.
La ola de protestas que enfrentó Chile desde octubre -que se saldan con una treintena de muertos- arrastraron a la economía local, que cerró 2019 con una expansión de 1,1%, su menor en una década.
Para este año, antes de la expansión de los casos de coronavirus en Chile -que bordean los 2.500 infectados y provocó la muerte de 8 personas- la estimación oficial de crecimiento del PIB se situaba en torno al 1%. Pero la crisis sanitaria mundial asestará también un golpe a la economía chilena, de una magnitud que aún no ha sido determinada por las autoridades.
El mandatario ultraderechista se opone a las medidas de cuarentena y de distanciamiento social aplicados en casi todos los estados brasileños. Para el exdirector de Asuntos Internacionales del Banco Central de Brasil, "la salud pública debe prevalecer sobre la economía".