Nahir Galarza (19), la joven argentina imputada por el asesinato de su novio Fernando Pastorizzo (20) en la ciudad entrerriana de Gualeguaychú pidió ampliar su declaración indagatoria y, tras más de tres horas con las fiscales, la cambió.

Según informa el periódico Clarín, la muchacha dijo que la noche de la muerte, él estaba muy enojado y fue él quien tomó el arma de su padre policía y que a ella, al intentar quitársela, "se le escaparon los disparos".

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En este punto, aclara el diario argentino, Nahir se contradijo con su primera declaración: el 30 de diciembre por la noche admitió que ella había disparado el arma por delante y por detrás.

La joven está detenida en la Comisaría del Menor y la Familia de Gualeguaychú desde el 30 de diciembre.

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