El monto de la planilla mensual de los jugadores de Oriente Petrolero, poco más de $us 120.000, está haciendo tocar fondo al club, debido en especial a la crisis que ha generado en el fútbol la cuarentena para evitar la propagación del Covid-19. Los verdolagas llegaron a pagar a finales de marzo el 50% del salario de febrero, y no tienen para más, pues al igual que el resto de los equipos de la División Profesional se quedaron sin ingresos tras la paralización del torneo Apertura.

Lo peor de todo, y lo que más preocupa a la dirigencia verdolaga, es que no tendrán ingresos durante al menos dos meses más. Es decir que no habrá entrada de dinero por recaudación de los encuentros, aporte de socios (uno de sus principales puntales para mantener el equipo) y patrocinadores. Estos últimos frenados porque no tienen un espectáculo donde lucir sus marcas.

Otra preocupación pasa a ser el tiempo de duración de la cuarentena, que comenzó el 22 de marzo y que debía terminar el 15 de abril pasado, pero que ya se alargó hasta fin de mes. Ello también afectará el reinicio del torneo Apertura, que, como están exigiendo la FIFA y la Conmebol, se lo debe realizar de a poco.

En la Conmebol ya se habla de una serie de requisitos para que los equipos vuelvan a entrenarse, sin mencionar si en un primer momento los partidos se jugarán a puerta cerrada, como lo piensan hacer en algunas ligas europeas, o con espectadores.

Postura inamovible

La falta de ingresos hace que los clubes mantengan la postura de pagar solo el 50% de los sueldos del marzo, y el 25% de los salarios de abril y mayo. Esta determinación ha sido rechazada por los jugadores a través de su gremio, Futbolistas Agremiados de Bolivia (FABOL).