El diálogo entre los dos grupos del Movimiento Al Socialismo (MAS) se esfuma. Ambas partes no ceden en sus condiciones. Evo Morales insiste que las autoridades gubernamentales deben ir a su marcha para iniciar la conversación, pero el Gobierno descarta ese pedido. La viceministra de Comunicación, Gabriela Alcón, afirmó que no existe seguridad en la movilización y también insistió en que el diálogo debe ser en un lugar neutral.
“No puede hablarse de dialogar con la amenaza de una intervención policial y de grupos de choque paramilitares. Nuestros dirigentes plantean las mínimas condiciones para entablar un diálogo sincero. Si quieren diálogo debe ser acá en la marcha. Yo cuando era presidente instruía a los ministros ir a las marchas para iniciar el diálogo”, afirmó Morales desde la marcha que ya se acerca a su punto final del sexto día: la localidad paceña de Achica Arriba, muy cercana a la ciudad de El Alto.
El líder cocalero también informó que mañana su movilización ingresará a la ciudad de La Paz desde los “cuatro puntos cardinales” y dijo que la marcha principal tendrá tres columnas: la central a la cabeza de su persona, otra conformada por mineros y gremiales y la tercera con campesinos e indígenas de varios puntos del país.
La marcha de los sectores que siguen al expresidente partió el martes desde la localidad de Caracollo, en la región de Oruro, llegó el miércoles hasta el pueblo de Lahuachaca, a unos 125 kilómetros de La Paz, y el jueves siguió hasta la población de Patacamaya, a unos 97 kilómetros de la sede de Gobierno. El viernes llegaron a la población de Ayo Ayo y hoy la marcha salió de Calamarca, a unos 71 kilómetros de distancia de La Paz. La movilización llegará hoy a la localidad de Achica Arriba.
Mientras, desde el Gobierno, la viceministra Gabriela Alcón insistió con el inicio del diálogo, pero descartó que sea en la marcha, como lo pidió Morales. La autoridad dijo que la negociación puede ser un punto neutral y le recordó al líder cocalero que él cuando era presidente nunca fue a una marcha a dialogar con sectores en protesta. Incluso, puso el ejemplo de Chaparina, cuando indígenas de tierras bajas fueron reprimidos por la Policía.
“Vamos a insistir en que el diálogo es el mecanismo para solucionar conflictos y no así enfrentar a las familias bolivianas. La convocatoria (al diálogo) está abierta. Hacemos una vez más la invitación, busquemos un espacio neutro, busquemos un espacio para llevar adelante (el diálogo) sin condiciones, un diálogo en el que se pueda abordar los temas. Vamos a un diálogo sin condiciones. Además, en la marcha no existen condiciones de seguridad y recordamos que Evo Morales (cuando era presidente) nunca negoció en una movilización”, dijo Alcón en entrevista con medios del Estado.
Mientras, los sectores afines al Gobierno instalaron un cabildo en la zona de Ventilla, en la ciudad de El Alto. Varios dirigentes pidieron a Evo Morales que cancele su marcha y le alentaron a que asista al diálogo.
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