El expresidente Evo Morales se pronunció este miércoles ante la memoria de los hechos de 2019 presentada por la Conferencia Episcopal de Bolivia (CEB). A su juicio, los jerarcas de la Iglesia Católica, con el documento, confiesan que fueron “cómplice”.

Mediante su cuenta en Twitter, el también jefe del Movimiento Al Socialismo (MAS) rechaza el informe, calificándolo como un “comunicado político” y reprocha que el clero no se pronunciara ante las acciones asumidas por la administración de Jeanine Áñez.

“Algunos jerarcas de la Iglesia Católica que callaron cuando gobierno de facto masacraba al pueblo y asaltaba al Estado, ahora justifican el golpe con sus comunicados políticos. Tratan de esquivar su culpa, pero lo que hacen es confesar que fueron cómplices. #ElPuebloPideJusticia”, posteó el exmandatario.

La memoria difundida por la CEB en la víspera indica que la diputada Susana Rivero y la senadora Adriana Salvatierra rechazaron la Presidencia después de la renuncia de Morales, y que la bancada del MAS aceptó participar en la sesión en la que Áñez llegó al poder.

El documento:

Sin embargo, las aludidas rechazaron dicha versión, considerando un “triste papel” que desempeñó la Iglesia Católica durante la convulsión social tras la anulación de las elecciones de octubre de 2019.

El documento indica que el MAS, en los diálogos de pacificación, negoció la seguridad de Evo, salvoconductos para exministros y las directivas de ambas cámaras del Legislativo como condiciones para pacificar el país.

El tuit:

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