Este martes el Gobierno convocó al Consejo Nacional de Autonomías, encuentro que tiene como punto central la consideración de la marcha del Censo de Población que debe realizarse en noviembre de este año. Antes de ese evento, el senador opositor, Rodrigo Paz, denunció que la cartografía del Censo está al 25% y que la boleta censal fue cambiada por quinta vez.
La reunión estará presidida por el presidente Luis Arce, por primera vez, y fueron convocados los nueve gobernadores del país, los ministros del área, representantes de los alcaldes y de las autonomías indígena originario. La última reunión de este ente se realizó en diciembre de 2021, aunque la agenda era distinta.
“La cartografía es fundamental, porque si bien puedes tener mucha tecnología, tarde o temprano tienes que ir de forma terrestre e identificar un edificio, casa, conventillo o un pahuichi; tiene que llegar alguien a ese punto e indicar el lugar de referencia para que el día del censo, la persona que vaya a censar tenga una referencia de cuántas boletas tiene que hacer por zona, nada de eso está en Bolivia culminado”, declaró Paz Pereira en una entrevista radial.
Este lunes el Instituto Nacional de Estadística (INE) publicó un comunicado en su portal oficial en el que aseguran que la actualización cartográfica se trabaja en coordinación con los municipios del país.
“Los protocolos de trabajo del INE establecen la coordinación directa con las autoridades municipales del área dispersa y con las juntas vecinales en las ciudades al momento del ingreso de las brigadas de Actualización Cartográfica Estadística” señala el boletín de la entidad.
La realización del censo en noviembre quedó en entredicho por los opositores, quienes aseguran que el manejo político que hace el Gobierno de este proceso, terminó de frustrar su realización.
A esas observaciones se sumaron la renuncia del Director Ejecutivo del INE, Humberto Arandia, que se produjo en mayo y se conoció recién el 8 de junio a través de la carta filtrada. Al día siguiente de conocerse esa carta, el Gobierno decidió el cambio de la ministra de Planificación, Gabriela Mendoza, y la reemplazó con Sergio Cusicanqui.
Un día después de esa posesión el Gobierno presentó a Gastón Cordero como el nuevo director ejecutivo interino del INE y dijo que a cargo del operativo del censo quedaba Marta Oviedo, que ya comandaba ese proceso.
Todos esos sucesos colocaron un manto de duda sobre la realización del censo, mientras el Gobierno intenta dar certidumbre acerca de su realización, aunque cada vez con menos éxito.
Desde la institución estatal anticipan mayor apertura desde agosto, un mes que es considerado clave en el desarrollo del proceso. El plazo para la actualización cartográfica vence en septiembre y ya surgen pedidos de “reprogramación”