Durante el primer día de la marcha liderada por el expresidente Evo Morales, las dos facciones del Movimiento Al Socialismo (MAS) se enfrentaron con violencia. Golpes, pedradas y explosivos en plena carretera en la región de Vila Vila (Oruro).
Ese fue el marco que aprovecharon los evistas para exigir al gobierno del presidente Luis Arce que se adelanten las elecciones generales. Es más, Morales, en la inauguración de su marcha, dijo que tiene de su lado “al tercer hombre del Estado”, en referencia al presidente del Senado, Andrónico Rodríguez, y que si el primer y segundo hombre “abandonan al pueblo”, Andrónico tomará las riendas del poder.
La respuesta del Gobierno fue inmediata. Los ministros de Arce ratificaron su acusación contra Morales de conspirar con su marcha, que pretende dar un golpe de Estado y acortar el mandato de Arce para forzar su habilitación como candidato. El Gobierno concluye en que “Evo Morales, de ser una víctima de golpe de Estado, ha pasado a ser un golpista confeso”, y que conforme a lo que manda la Constitución, se iniciarán las acciones penales que correspondan.
El dirigente de la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (Csutcb) del bando evista, Ponciano Santos Colque Cruz, sin pelos en la lengua, dijo ante la prensa que “ahora sí”, dirigiéndose a la población, pidió “que se ponga en emergencia, en alerta”, y a continuación conminó a Arce:
“Porque llegó el momento, estamos cansados con este Gobierno (…) ahora sí, públicamente digo: ahora sí (Luis Arce) tiene que convocar a elecciones generales, porque no queda otro (camino)”, afirmó Colque Cruz en una pausa de la marcha en plena carretera entre Oruro y La Paz.
A lado suyo estaba Evo Morales quien, pacientemente, esperó que hable toda su cúpula de dirigentes denuncie que la gente de Arce los estaba esperando en Vila Vila con grupos de choque, pero que nada los detendría hasta llegar a La Paz, porque la marcha es “para derrotar a este Gobierno corrupto, incapaz y hambreador”.
Por su parte, Morales reforzó la denuncia de la “emboscada” que tsupuestamete enían lista los arcistas en Vila Vila. Desde el inicio de la marcha que comenzó en Caracollo, fue tejiendo el discurso contra el mandato de Arce, incluso inmiscuyó a las Fuerzas Armadas y a la Policía Boliviana, y con un guiño, invitó a ambas instituciones a unirse a su causa.
En ese marco, el hábil político disparó las siguientes frases en su primer día de marcha: “Si el primer y segundo hombre abandonan al pueblo, está con nosotros el tercer hombre del Estado, hermano Andrónico Rodríguez”, dijo Morales al inicio de su marcha.
“Pido a las Fuerzas Armadas y a la Policía estar con su pueblo y no estar reprimiendo”, dijo Morales horas después tras asegurar que desde esas instituciones “buenos policías y buenos militares”, le informaron que desacataron la orden de intervenir y reprimir.
Mientras la nutrida caravana avanzaba a paso firme por el carril de ida a La Paz, cerca a la población de Vila Vila, un numeroso grupo de personas, muchas de ellas con cascos de minero, se instaló en pleno camino a “controlar” el tránsito de vehículos.
Mientras, otros se camuflaban entre las rocas y pajas de los cerros cercanos, como hace cinco años cuando en la mañana de ese 10 de noviembre de 2019, afines a Evo emboscaron a dinamitazos a pasajeros de11 buses que iban a La Paz a protestar contra el “fraude” electoral de Morales.
La tarde de ayer algo similar pasó, pero los “emboscadores” fueron rebasados en número, golpes, pedradas y explosivos. Apenas se acercaron a Vila Vila, los evistas dijeron “presente” haciendo detonar explosivos y con las piedras bien puestas en las ondas que muchas mujeres y varones, desafiantes hacían girar en el aire. Y la respuesta del otro bando fue similar.
De repente, en medio de gritos y fuertes explosiones, los evistas tomaron el terreno a punta de hondazos, palazos y maldiciones contra los arcistas, quienes escapaban como podían y se perdían entre rocas puntiagudas de los cerros; no todos tuvieron suerte.
En la huida muchos tropezaron y los evistas se fueron con todo. Sus enemigos fueron revolcados en medio de la tierra, piedras y pajas, mientras recibían patadas por todo el cuerpo, golpes con palos y mil maldiciones. La Policía que unas pocas horas antes estaba en el lugar, desapareció.
Según la versión de la exministra Teresa Morales, la marcha fue sorprendida a punta de explosivos de dinamitas, hecho que por unos momentos dispersó la marcha y todos escaparon como pudieron. En la confusión, no se supo de la suerte de Evo, Andrónico y su dirigencia. Fue un caos de miedo, violencia y desesperación. Tras el hecho y superar a los arcistas, la marcha pasó triunfante por Vila Vila y se escuchó a muchas voces decir que nada ni nadie los detendría hasta La Paz donde cumplirá su meta.
La ministra de Salud, María Renée Castro, informó anoche que producto de la gresca hubo 26 heridos, entre evistas y arcistas. Tienen entre 29 y 60 años de edad. La ministra detalló que, aunque no revisten gravedad, hay fracturas de codos y costillas; contusiones, heridas en cabeza, brazos y rostro de los afectados.
No obstante, el objetivo de acortar el mandato de Arce no surgió tras el enfrentamiento. Antes del 17 ya se fue cocinando a fuego lento. El dirigente Colque Cruz es uno de sus principales expositores. “Un gobierno incapaz que no resuelve los problemas del país, va a tener que convocar a elecciones adelantadas”, sentenció el evista el lunes 16.
Arce a través de sus ministros de Defensa y Gobierno reforzó su postura de que Evo gesta un “golpe” con el único afán de habilitarse y volver al poder a pesar de la prohibición constitucional.
HERIDOS
Tras el enfrentamiento, el Gobierno informó que como resultado existen 26 heridos que tienen desde golpes, heridas cortantes hasta fracturas en costillas o alguna extremidad.
PROCESO CONTRA EVO
El Gobierno anunció que por las acciones “golpistas y antidemocráticas” del expresidente contra el gobierno de Arce, se prepara una acción penal para procesar a Evo Morales.
EN PANDURO
La marcha de Evo llegó hasta la localidad de Panduro para pasar la noche y continuar este miércoles su travesía a La Paz.
Morales destaca que junto a él marcha "el tercer hombre del Estado", en referencia al presidente del Senado, Andrónico Rodríguez. La marcha avanza, aunque con recelo por un posible enfrentamiento con los arcistas