El papa Francisco pidió este sábado a los participantes de la COP28 en Dubái que hagan de la cita "un punto de inflexión", capaz de propiciar "una aceleración decisiva hacia la transición ecológica". Francisco ya dedicó a la cuestión su encíclica Laudato Si, en 2015 -un manifiesto de 200 páginas por una "ecología integral"

Francisco eleva el tono respecto a la importancia de esta COP28 que se celebra en Dubai. El pontífice argentino de 86 años tuvo que renunciar a viajar a la COP por una bronquitis, de manera que su mensaje fue leído por el número dos del Vaticano, el cardenal Pietro Parolin, secretario de Estado. "Que esta COP sea un punto de inflexión, que manifieste una voluntad política clara y tangible, que conduzca a una aceleración decisiva hacia la transición ecológica", afirmó el papa en su mensaje a los representantes de cerca de 200 países.

Dicha aceleración, prosiguió, debe lograrse "por medio de formas que posean tres características: que sean eficientes, que sean obligatorias y que se puedan monitorear fácilmente. Y que se realicen en cuatro campos: la eficiencia energética, las fuentes renovables, la eliminación de los combustibles fósiles y la educación en estilos de vida menos dependientes de estos últimos".

"Por favor, vayamos hacia adelante, no para atrás", enfatizó Francisco, que desde su elección en 2013 ha hecho de la defensa del medio ambiente uno de los ejes de su papado.

Francisco dedicó a la cuestión su encíclica Laudato Si, en 2015 -un manifiesto de 200 páginas por una "ecología integral"-, y el pasado 4 de octubre publicó la exhortación apostólica Laudate Deum, que pide a las grandes potencias abandonar las energías fósiles.

 Las dudas que siembra EE.UU.

Además de la de Francisco, otra ausencia está marcando esta COP28, la de Joe Biden. El mandatario estadounidense  entró en la Casa Blanca en 2021 con discurso nítido de apoyo a la lucha contra el cambio climático. Eso, unido a nuevas licencias para extraer petróleo, ha supuesto un cuestionamiento del compromiso de este país sobre su agenda verde. 

La vicepresidenta de EE UU, Kamala Harris, ha acudido a la cumbre para tratar de despejar las dudas que pueda haber sobre la actual Administración. Y ha anunciando desde esta ciudad de Emiratos Árabes Unidos una importante aportación al Fondo Verde de Naciones Unidas: 3.000 millones de dólares. Este fondo es un instrumento ligado a las negociaciones que bajo el paraguas de la ONU se celebran desde hace tres décadas para combatir el cambio climático. El último gran anuncio de aportación a este fondo por parte de EE UU se remonta a 2014, durante la Administración de Obama