Por: Eduardo Ruilowa
El antiguo aeropuerto de San Ignacio de Velasco, Juan Cochamanidis, fue invadido hace casi un año por los autodenominados 'Sin techo', quienes construyeron casas de material y otras viviendas rústicas dentro de las más de 30 hectáreas que conforman este terreno.
El concejal de Creemos, Cristian Méndez, estima que son cerca de 1000 familias las que se encuentran asentadas irregularmente en el lugar y continúan llegando más, incluso de otros municipios aledaños.
Méndez aseguró que casi todos los concejales esperan recuperar este terreno para que funcione como área de equipamiento y se construyan instalaciones que el municipio necesita, además que se encuentra en una zona céntrica y estratégica por lo que podría ser aprovechado de una manera más favorable para la capital ignaciana.
El concejal demandó al alcalde que tome cartas en el asunto, ya que asegura que es su competencia decidir cómo se deben ocupar con estos terrenos que fueron invadidos hace casi un año.
Por su parte, el alcalde Ruddy Dorado afirmó que se encuentra trabajando con la Procuraduría del Estado para recuperar los papeles de estos terrenos, ya que ni el municipio de San Ignacio de Velasco, ni la extinta Aasana, tienen la documentación pertinente.
En cuanto a la ocupación del terreno, manifiesta que se tiene una planificación para que el lugar cumpla un función de bien social. “Necesitamos urbanizar, tener áreas verdes, vamos a construir parques y obras hermosas para San Ignacio”, señaló la autoridad.
El nuevo aeropuerto internacional de San Ignacio funciona desde mediados de este año, cuando fue habilitado antes de los conflictos en la antigua terminal donde la Dirección de Aeronáutica Civil (DGAC) no autorizaba los vuelos porque los avasalladores estaban asentadas cerca de la pista, lo que significaba un peligro para las operaciones aéreas.
La Policía tendrá que informar al Ministerio Público por qué no ejecuta las otras cuatro órdenes de aprehensión contra el grupo de avasalladores de tierras. Esperan informes completos de peritajes de teléfonos secuestrados