Este viernes se realizó una reunión entre la Alcaldía y un grupo de los asentados en el Jardín Botánico. Los representantes de la comunidad ayorea se comprometieron a abandonar el lugar, mientras que los de la comunidad Chiquitana se mantiene en el predio.
El acuerdo con la comunidad ayorea se logró luego de escuchar el compromiso del municipio cruceño de considerar algunas demandas del sector.
"Yo he retirado a la gente ayorea confiando en lo que ha prometido la alcaldesa", dijo Fernando Chiqueno, representante nacional de los pueblos ayoreos.
El otro grupo que se resiste a desalojar es la comunidad chiquitana a la cabeza de su dirigente, Claudio Rojas, que condiciona la salida a tener una respuesta escrita, donde el Gobierno Municipal se comprometa a un plan de vivienda.
Respecto a la autorización por parte del INRA de ingreso a los predios, Rojas dijo que el INRA no les dio autorización de ingreso porque no es competencia de ellos, sino del municipio.
Angélica Sosa, alcaldesa de Santa Cruz de la Sierra, agradeció la predisposición la comunidad ayorea y solicitó al dirigente Claudio Rojas de la comunidad Chiquitania de deponer su decisión de mantenerse en el lugar hasta que no se les comprometa una vivienda.
"Valoramos la decisión de un grupo de comunarios que han decidido salirse de manera pacífica e inmediata de los predios. Sin embargo, llamamos a la reflexión a aquellos que aún permanecen en el lugar y pedimos que respeten esta área que es de los cruceños", dijo Sosa.
El equipo jurídico de la Alcaldía y el director del Jardín Botánico y Áreas Verdes presentó este vienes una denuncia formal por el el delito de avasallamiento, asociación delictuosa, destrucción y deterioro de bienes del Estado y a la riqueza natural