A través de cartas, la Federación de Ganaderos de Santa Cruz (Fegasacruz) llamó a los propietarios de predios avasallados a una reunión de coordinación de acciones para buscar soluciones a esta problemática que aqueja especialmente a productores agropecuarios de la zona chiquitana.
Según la nota, Fegasacruz realizará representaciones ante el Inra, para denunciar con documentos en mano el avasallamiento de predios productivos que se encuentran con/o en proceso de saneamiento.
Para este cometido, Fegasacruz solicitó a los denunciantes que se presenten con toda la documentación de respaldo.
Solo en San José de Chiquitos son 12 los predios avasallados, de propiedad de la Diócesis de San Ignacio, de una colonia menonita Valle Verde y de ganaderos y agricultores.
En Pailón, una de las propiedades que sufre avasallamiento desde el 2013 es Porvenir, de una decena de hermanos. Su caso fue mediatizado y viralizado. Una de las dueñas, Lenny Justiniano, lamentó la tardía reacción de Fegasacruz, el temor de los productores que conocen el funcionamiento de la mafia que trafica la tierra y que no se atreven a denunciar, y apuntó a uno de los concejales de Pailón.
“Pailón es el centro de operaciones de estos avasallamientos en toda la Chiquitania; en mi caso usaron hasta orugas y camionetas de la Alcaldía”, acusó.
La afectada dijo que desde 2013 sufre este problema, que se acentuó en 2018, y que recién Fegasacruz empieza a dar respuesta. “Es la primera vez que me convocan a una reunión”, dijo.
Para ella, los productores cometen un grave error al dejarse extorsionar por los traficantes de tierra, que se forma continua siguen apareciendo a lo largo de tiempo.
Reporte. Habla de 1.400 comunidades del interior del país con resoluciones de asentamiento humano que duplican a las comunidades indígenas chiquitanas. Deduce una colonización pura y dura en la región