El festival de gastronomía con identidad cruceña impulsado por el Centro de Cultura Plurinacional ofrece platos y sabores innovadores.... o no tanto. Yessenia Gil Barba (28) recuerda que probó este helado de totaí en Corumbá mientras continuaba su etapa estudiantil en Puerto Suárez.

La inquietud por ese sabor que probó años atrás influyó en el tema elegido para su trabajo de grado en la carrera de química. Las propiedades del totaí, rico en vitamina A, en nutrientes y en fibra, componían parte central de su propuesta.

Decidida a sacar un verdadero helado de totaí, demoró ocho meses mientras experimentaba las diversas fórmulas junto a un ingeniero de alimentos que le ayudaba a depurar el sabor y estabilizar la mezcla de los ingredientes.

Hace dos años comenzó su producción artesanal, pero la pandemia puso freno a su empeño. Fue hace pocos meses atrás cuando retomó la idea de producir nuevamente el helado de totaí para comercializarlo en ferias artesanales. Lo vende en pequeñas bolas de Bs 5 cada una. 

Yessenia asegura que es un producto interesante y que cuenta con demanda. El sabor es agradable gracias a la fórmula que utiliza para crear el helado. Aguarda los resultados de un estudio de mercado para lanzar el producto de manera más intensa.

Junto al helado, la mermelada de totaí acompaña sus vitrinas ante la curiosidad de los más mayores, que recuerdan "el sabor chicloso"  del fruto de la palmera, y la sorpresa de los más jóvenes, quienes apenas pueden identificar el totaí.

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