Una niña de ocho años de edad, que permanecía desaparecida desde el 7 de este mes fue encontrada sin vida, enterrada en una comunidad en la jurisdicción de San Ignacio de Velasco, según confirmaron la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) y la Fiscalía.

Un informe oficial de la Felcc señala que los agentes policiales, al tener conocimiento de la desaparición de la niña Yiseli Faldín Aré, de 8 años intensificaron la búsqueda en San Ignacio de Velasco y se trasladaron hasta la comunidad de Miraflores de San Rafael de Velasco.

 
En el lugar tomaron contacto con un hombre y una mujer mayores de edad, padres de una adolescente de 17 años. Los esposos, en la entrevista dijeron tener conocimiento de que la niña desaparecida se encontraba muerta.

Asimismo, mostraron nerviosismo y cayeron en algunas contradicciones. Luego revelaron que la niña desaparecida estaba sin vida y que, quien le quitó la mató fue su hija, una adolescente de 17 años. 

Los policías encontraron a la adolescente y la entrevistaron, pero quedaron asombrados. La adolescente, de manera burlesca, confesó que le había quitado la vida a la pequeña, con un cuchillo de cocina. Luego mostró el arma y llevó a los policías hasta el lugar donde estaba enterrada, en Miraflores de San Rafael de Velasco.

 
Los policías evidenciaron maleza en el lugar, era un lugar inaccesible, además había un promotorio de tierra tapado con ramas secas.

 
Los policías empezaron a cavar en el sitio y retirar la tierra, donde a poca profundidad encontraronun plástico de color azul de tela multicolor que envolvía al cuerpo sin vida de la niña.

Tras el levantamiento legal del cadáver, los policías lo trasladaron hasta la morgue de San Ignacio de Velasco para la correspondiente autopsia de ley.

 
Las diligencias se realizan con la participación del fiscal Víctor Hugo Cervantes. El fiscal confirmó la aprehensión de la adolescente de 17 años y de sus padres por razones de investigación. Sin embargo, la Policía intensifica las pesquisas, pues se presume que existan otras personas vinculadas al crimen que causó conmoción.