Santa CruzSOCIEDAD
La Nochebuena los encontrará internados, recibiendo quimioterapia; estas son sus tiernas cartitas
Liam, Alexander y Yuliane están internados en el Oncológico. Itzayana acaba de terminar un ciclo más de quimioterapia y debe retornar el 3 de enero, y Brenda también debe volver por más. A su corta edad ya saben de grandes retos: luchar por su vida, aún así tienen sueños
20 de diciembre de 2024, 7:00 AM
res madres bajaron del primer piso donde están sus niños internados en el Hospital Oncológico. Son jóvenes, tienen entre 25 y 30 años, sus ropas son muy sencillas y su corazón también, están enfocadas en que sus niños con cáncer pasen la dura prueba de la quimioterapia y ya están dadas a la idea de que les tocará pasar la Navidad ahí también.
Su humildad les ha permitido aceptar el diagnóstico que en un principio las hizo temblar, viven un día a la vez y no se permiten la licencia de llorar ni de angustiarse, al menos no delante de sus hijos, porque ellos las necesitan fuertes, deben verlas tranquilas, confiadas en que esta prueba pasará.
En este momento hay 23 niños internados en el primer piso, cuatro de ellos en terapia intensiva. Ellos solitos y otros, con la ayuda de sus padres, escribieron sus cartitas en donde derraman sobre el papel sus sueños, la mayoría pide un regalo de Navidad.
Las otras dos mamás que entrevistamos ya no tienen internados a sus hijos, pero deben volver, han terminado una quimio más, pero faltan otras. Saben que al menor signo de fiebre deben correr al hospital, por lo que nada es seguro para ellas, solo su fe y la convicción de que de esta, saldrán.
De los 5 niños de esta nota solo pudimos ver a Itzayana, que llegó caminando, muy entusiasmada, aguardando por su refrigerio y el regalo que llevaron unas damas solidarias. Liam, Alexander y Yuliane están internados, solo sus padres pueden verlos y acompañarlos en su lecho.
La pequeña Brenda apareció cargada en los brazos de su padre, pero seguía muy débil. Recogió un balde con pequeños regalos y se fue a casa, ella, al igual que Itzayana podrá pasar la Nochebuena en su hogar.
A continuación publicamos las cartitas de estos cinco pequeños, y si usted se siente movido a cumplirles sus deseos, puede canalizarlos a través de la presidenta de la asociación de madres de familia del Oncológico, con Ana Machado, al 74967072.
Las jóvenes madres están en el hospital días completos, Francisca Mendieta (26), por ejemplo, es de Buena Vista, su niño Alexander (6) tiene LMA, que significa leucemia mieloide aguda, un cáncer de la sangre y la médula ósea que se caracteriza por un rápido empeoramiento si no se trata. Tiene dos hijos más pequeños, de 4 y 2 añitos, esperándola en casa, no los ve desde hace 9 meses, solo por videollamada. "Les explico que no puedo ir con ellos porque estoy cuidando a su hermanito, les muestro el suero y ellos entienden", dice resignada a la idea de que esta Nochebuena no tendrá a la familia unida, pero es consciente también de que este sacrificio vale la pena, para tener a su Alexander muchas navidades más, sanito.
Habla despacio, confía en que los abuelitos están cuidando bien a sus otros niños. Cuenta que Alexander empezó a sentirse enfermo hace un año, presentaba mucha fiebre y dolor en los huesos. En ningún centro de salud daban con lo que tenía, hasta que finalmente fue trasladado a Santa Cruz, hasta el Hospital de Niños, donde descubrieron el cáncer.
Alexander hizo dos cartas en total, en una pidió una bicicleta y en otra un teléfono. Las entregó a la sicóloga del Oncológico y a la profesora de la escuelita que funciona ahí adentro.
Le siguen doliendo los huesitos, pero él sueña con una bicicleta, mientras sus hermanitos esperan por Alexander, quieren que aparezca la noche de Navidad.
"No tenemos nada seguro, no podemos planear a futuro, ni siquiera el día de mañana"
A la pequeña Brenda (3) su mamá le dijo que iba a escribir lo que ella desea para Navidad en una carta, que se lo iban a pedir a Papá Noel, y la niña con entusiasmo pensó en un vestido de princesa (talla 4), también quiere una muñeca Barbie y una cocina con accesorios. En agosto fue diagnosticada con leucemia linfoblástica aguda (LLA), es un cáncer de la sangre y la médula ósea que se caracteriza por la producción excesiva de linfocitos.
En julio empezó a dolerle la rodilla, le dijeron de todo, primero que era una fisura, luego un esguince, pero no le pasaba el dolor, y su madre juntó el dinero para llevarla a un médico particular, que fue el que la ayudó a derivarla al Hospital de Niños, donde finalmente dieron con al causa de sus dolores: tenía cáncer. Para entonces la pequeña ya no podía caminar.
Yhirleny Cuchallo (30) tiene otro hijo, de 10 años, al que ve poco porque está atendiendo a Brenda, hace un par de días la niña terminó su décima quimio y se fueron a casa, pero sin la certeza de dónde pasarán la Navidad: "No tenemos nada seguro, no podemos planear a futuro, ni siquiera el día de mañana porque si esta noche le da una fiebre fuerte tenemos que correr al hospital y de nuevo la internan", cuenta con sinceridad. Está terminando el 2024 de la forma más inesperada, pero confiada en que de esta saldrán.
Liam pedía un conjunto para su graduación del kínder, acto al que no llegó porque el cáncer no le dio permiso
Lidia Choque (27) se vino con su hilo Liam (6) desde Potosí. Peregrinó por varios lugares, en su departamento, pero también en La Paz y Cochabamba. El niño sufría de dolores en sus huesos, hasta que no pudo pararse ni sentarse más. Luego de varios laboratorios y ecografías sospecharon que se trataba de leucemia.
Así fue como terminaron en Santa Cruz, donde Lidia tiene familiares. También se trajo a su hija menor de 4 años y a su esposo. Sus vidas cambiaron, giran en torno a la salud de Liam.
El pequeño pedía un conjunto para la graduación del kínder, acto al que no pudo asistir porque el cáncer no dio permiso, llegó y les cambió la vida.
Pero Lidia no tiene tiempo para lamentarse, ella misma se dice: "¿Qué sería de mis hijitos si no estoy bien? Por ellos hago todo".
"Dieron un giro nuestras vidas, que sea lo que Dios diga"
Desde mayo el Oncológico se ha convertido en su segundo hogar. Su niña de 4 años, Yuliane, tiene LMA (leucemia mieloide aguda). Las primeras señales de alarma fueron los moretones y las pecas que aparecieron de la nada. Después empezaron los sangrados, por la nariz y en las heces.
La mamá, Lendy Huaynoca (27), no sabe cómo pasará la Nochebuena, "que sea lo que Dios diga", expresa resignada, ya sea que les toque internadas o en casa. Era comerciante, pero lo abandonó todo para dedicarse a la pequeña, "dio un giro mi vida", dice.
Una bicicleta y un vestido de princesa, de talla 5, es lo que le gustaría darle, para provocarle una sonrisa. Para ella, como madre, solo pide fuerzas.
Debe volver a una nueva quimio el 3 de enero
Itzayana (4) llegó caminando al patio del Oncológico, tenía dos días de haber terminado un ciclo de quimioterapia. Sabe que debe volver el 3 de enero por causa de la leucemia linfoblástica aguda (LLA) que le detectaron el 17 de junio.
Llegó anoticiada de que un grupo de damas solidarias les invitarían un refrigerio y les entregarían juguetes. Se puso sus mejores galas. Una vinchita negra le cubre la frente donde ella debería ver cejas y cabello. Sabe que luce diferente, pero ella y su padre hicieron un trato, se rasuraron toda la cabellera y pronto verán cómo sale una nueva.
Como la ocasión lo ameritaba, se pintó los ojos, como aprendió en los tutoriales de maquillaje que tanto le gusta ver. Por eso pidió en su cartita una tablet, porque quiere mirar mejor los videos de TikTok.
Su mamá, Ivana, tiene dos hijos más, niños que son testigos de la valentía de madre e hija.
Llevaron sonrisas y regalos, con la premisa de que no son invisibles para Dios
El miércoles 160 niños recibieron pequeños regalos que llevaron una decena de damas (Grupo de Acción Social 4x4), que desde 2018 acostumbran llevarles algo de alegría, vuelven también para el Día del Niño, de las madres, y este 6 de enero, Día de Reyes, planean retornar.
Coincidimos ese día con ellas y fuimos testigos del amor que reparten.
Francia Frías confiesa que no importa cuántas veces vaya, lo que más la reta es llegar a la internación y a la terapia intensiva. "Vemos personas bien angustiadas", comprende que se trata de padres de familia que no se mueven del lado de sus hijos, que no tienen nada a la mano ni para su aseo personal.
"También he visto familias que se trasladan con todos sus hijos, porque no tienen con quién dejarlos, entonces están todos en el hospital, mientras aguardan por el niño que está internado", cuenta Francia, cada día más consciente de lo afortunada que es.
Invita a que cualquier persona que se sensibilice y que quiera dar su aporte, su regalo, las busque, pueden llamar al 760-40252.