Desde el Ministerio de Salud informaron que se ha movilizado a 23 médicos para la atención a vecinos, bomberos, militares y voluntarios que trabajan en la sofocación del fuego en diferentes municipios, principalmente en la región de la Chiquitania del departamento de Santa Cruz, donde ya se realizaron más de 150 atenciones de salud.
“Nosotros, como Ministerio de Salud, hemos respondido con nuestros programas ministeriales, brindando atención médica, y al momento hemos prestado 154 atenciones”, informó el jefe de la Unidad de Gestión de Riesgos, Emergencias y Desastres, Milton Gonzales.
Explicó que se han conformado 14 brigadas, denominadas Equipos de Respuesta Rápida, que pertenecen a los programas ministeriales Safci-MiSalud, Telesalud y Bono Juana Azurduy.
Estas brigadas recorren a pie las diferentes comunidades, cargando sus mochilas tácticas y botiquines.
La última semana, los médicos atendieron a pacientes con conjuntivitis, rinitis alérgica, hipertensión arterial, laringitis, deshidratación, agotamiento físico, contracturas musculares, así como quemaduras y enfermedades respiratorias, entre otros.
Gonzales indicó que, a pesar de las condiciones adversas debido a los incendios forestales, los médicos hacen todos los esfuerzos para llegar a tiempo con las atenciones a la población afectada.
El funcionario recomendó a la población que, apenas se presente una infección respiratoria, como picor en la nariz o en la piel, se lave inmediatamente con abundante agua, no se automedique y acuda a un centro de salud o brigada médica.
También sugirió usar barbijo en caso de gran humareda, y evitar las actividades físicas durante la mañana y la tarde, ya que son los horarios en los que se concentra mayor cantidad de micropartículas contaminantes que afectan la calidad del aire y, por consiguiente, la salud de las personas.
Desde la Unidad de Gestión de Riesgos, Emergencias y Desastres del Ministerio de Salud y Deportes se realiza el monitoreo diario de la situación, y los médicos tienen la misión de quedarse el tiempo que sea necesario para brindar la atención a la población.
Quieren rescatar sus tradiciones. Institucionalizaron esa costumbre para todos los días miércoles y brotan pecho por la iniciativa. Además, entre los profesores ceden un porcentaje de su salario para pagar a otro colega que habla bésiro, para que les enseñe a los escolares