El nieto que mató a su abuela por robarle dinero para comprarse drogas, fue sentenciado a 30 años de cárcel sin derecho a indulto, luego de someterse a un procedimiento abreviado.

La audiencia se realizó este viernes, 19 de mayo, en el Palacio de Justicia, lugar donde el imputado confesó haber arrebatado la vida de su abuela, la mujer que lo crio desde pequeño, pero por sus vicios acabó matándola.

El fiscal Daniel Ortuño, indicó a EL DEBER que Benito Pinto Coroite, de 31 años, decidió someterse a un procedimiento abreviado.

Pinto fue imputado por el delito de parricidio, crimen que cometió en contra de Emiliana Mendizábal, de 80 años, en el barrio Urkupiña, zona de la Pampa de la Isla, la medianoche del lunes, porque su abuela se negó a darle dinero para sus drogas. 

El nieto asfixió y golpeó a su abuela hasta matarla, luego salió de la casa y horas después retornó para llevarse Bs 1.500, que eran los ahorros de la víctima. Con ese dinero, se compró alcohol, ropa, un parlante, un celular y otras pertenencias con las que pretendía huir fuera de la ciudad.

Sus hermanos y tíos no hallan consuelo por la pérdida de la abuela de 80 años, más aún que el nieto favorito fue quien le arrebató la vida. 

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