Óscar Urenda, secretario de Salud de la Gobernación, y un equipo del Servicio Departamental de Salud (Sedes) de Santa Cruz, comandado por su director, Marcelo Ríos, viajarán en las próximas horas al departamento de Beni para brindar su apoyo a las autoridades de salud de esa región, a pedido de la presidenta Jeanine Áñez.
“Sí, me llegó la invitación de la presidenta. Iremos con el ministro de Defensa y un equipo del Sedes, integrado por el doctor Marcelo Ríos, el doctor Roberto Tórrez (gerente de Epidemiología) y el doctor Boris Chang”, dijo Urenda a EL DEBER.
“Vamos a escuchar a los hermanos benianos. Vamos a ver qué han hecho y qué tienen planeado hacer, para que nosotros veamos la forma de ayudarlos, coordinar de la mejor manera y proporcionarles apoyo”, agregó la autoridad sanitaria de Santa Cruz.
La presidenta Áñez pidió colaboración también al doctor Alfonso Tenorio, representante de la Organización Mundial de Salud (OMS) en Bolivia, para reorganizar la lucha contra el virus en Beni y montar un nuevo hospital de emergencia con capacidad para 150 camas.
Beni es uno de los departamentos más golpeados por la pandemia de Covid-19 y el que más dificultades atraviesa a raíz de que sus hospitales han colapsado por el desborde de pacientes con coronavirus y porque el personal de salud ha sido diezmado por la enfermedad.
Hasta ayer sábado, el departamento oriental tenía 1.097 casos confirmados, 555 descartados, 256 casos por confirmar o descartar, cuatro pacientes recuperados y 67 personas fallecidas.
Hay médicos infectados que siguen atendiendo por vocación. La Sociedad Boliviana de Terapia Intensiva certifica que hay solo 6 UTI completas. Una pareja reparte medicamentos y recibe críticas, mientras hay gente muriendo en casa