La Fuerza Naval en la ciudad de Bermejo reforzó los controles para impedir que personas y botes crucen a territorio de Argentina, debido a la crecida del río por las precipitaciones pluviales.
El jefe del Área Naval, capitán Fernando Suárez, confirmó que los controles preventivos se realizan en sectores de la orilla del afluente para precautelar la integridad física de las personas que ponen en riesgo su vida al cruzar el río en esta época de lluvias.
"No hemos militarizado la frontera, lo que estamos haciendo son controles a lo largo de los 75 kilómetros del río Bermejo para la salvaguarda de las personas por la riada y evitar pérdidas humanas, además de cumplir en la lucha contra el contrabando", dijo Suárez.
Pese a la crecida del río, ciudadanos de Bermejo cruzan a bordo de los gomones (botes artesanales) y después ingresan por pasos ilegales en la localidad de Aguas Blancas, en territorio de Argentina, para adquirir mercadería, principalmente productos comestibles y bebidas alcohólicas, aprovechando el bajo tipo de cambio, y trasportarlos por la misma vía a jurisdicción boliviana.
El jefe de la Comisaría de la Policía provincial de Salta, Enrique Omar Mealla, advirtió que se reforzaron los controles con más efectivos para impedir el ingreso de bolivianos.
Según Mealla, el control fronterizo será estricto de ahora en adelante por instrucciones superiores en ese paso entre Aguas Blancas y Bermejo.
La Gendarmería Nacional del vecino país también incorporó más efectivos para cumplir con su misión de resguardo territorial frente al rebrote del Covid-19.
El presidente de la Federación Regional Única de Trabajadores Gremiales de Bermejo, Freddy Rueda, admitió que ahora es complicado cruzar a territorio argentino y ayer varias personas se quedaron en Aguas Blancas para retornar en la madrugada de este viernes, aprovechando que hay menos control.
Rueda agregó que el Gobierno boliviano debe buscar alternativas de empleos para frenar el contrabando hormiga por este paso fronterizo.