El medio maratón de trenes sin rieles de Elkmont en Alabama, Estados Unidos, recibió un participante sorpresa cuando Ludivine, un sabueso de dos años y medio, se unió accidentalmente a la carrera después de que lo dejaran salir a orinar.

Después de un descanso, Ludivine vio a cientos de personas corriendo y pensó que parecía un juego muy divertido. Intrigada, rápidamente decidió unirse al juego y corrió junto a los competidores. Ludivine partió con los atletas y procedió a recorrer todo el circuito de 21 kilómetros.

Los corredores en la maratón dijeron que se salió de la pista en varias ocasiones, incluso tomando desvíos para explorar olores interesantes. Sin embargo, eso no le impidió llegar al séptimo lugar en poco más de una hora y media. Incluso recibió una medalla por sus esfuerzos y su dueña, April Hamlin, se sorprendió.

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