Aunque se esperaba un amplio triunfo de los republicanos en las elecciones de mitad de período, los demócratas resisten y tienen esperanzas de mantener el control del Senado

9 de noviembre de 2022, 7:39 AM
9 de noviembre de 2022, 7:39 AM
Centro de votación.
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Republicanos y demócratas mantienen una lucha feroz e incierta por el control de Congreso de Estados Unidos tras las elecciones de este martes.

A falta de muchos resultados oficiales, el Partido Republicano recuperaría el control de la Cámara de Representantes, según proyecciones, pero hasta ahora los números descartan una "ola roja" y muestran una dura resistencia de los demócratas en batallas clave.

Según la cadena estadounidense CBS, socia de BBC, los republicanos se perfilan como mayoría en la cámara baja del Congreso. Sólo necesitan ganar cinco escaños que están ahora en manos demócratas para recuperar el control.

Pero las matemáticas son más complejas para el Senado, que renueva a un tercio de sus miembros con algunas carreras demasiado igualadas como para anticipar quién gana.

Elecciones para la Cámara de Representantes
BBC

En el Senado actualmente hay un empate 50-50 que rompe la vicepresidenta Kamala Harris, quien tiene derecho a votar en la cámara alta cuando se presenta esta situación. Cualquier cambio puede desequilibrar la balanza y hay carreras muy disputadas en Arizona, Nevada y Georgia.

Los demócratas podrían considerar un gran resultado mantener el control de la cámara alta. Por ejemplo, John Fetterman se declaró vencedor en su disputa por el Senado por Pensilvania, lo que supone un importante triunfo al recuperar un puesto que estaba en manos republicanas.

"Aunque un solo resultado no marca una elección, Pensilvania eleva los ánimos de los demócratas considerablemente", dijo John Sudworth, corresponsal de la BBC en Estados Unidos, tras conocerse el resultado.

"Definitivamente no es una ola roja, eso es seguro", admitió en televisión el senador republicano Lindsey Graham.

John Fetterman.
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John Fetterman da a los demócratas un triunfo clave para el Senado.

Los republicanos no arrollan a los demócratas

Análisis de Anthony Zurcher, corresponsal de la BBC en EE.UU.

Al menos por ahora en las elecciones de mitad de período de 2022, a los republicanos les va suficientemente bien pero no excelente.

En las contiendas por las gobernaciones, republicanos de alto perfil han ganado en Florida, Texas y Georgia, pero otros dos gobiernos estatales han pasado a manos de los demócratas.

Los republicanos solo tenían que darle la vuelta a cinco escaños en la Cámara de Representantes para tener una mayoría, y parecen encaminados a lograrlo.

Pero no están ganando todas las contiendas ajustadas y no están consiguiendo ninguna victoria rotunda y sorprendente.

En el Senado los resultados son todavía más inciertos. Los republicanos han ganado estados en los que tenían ventaja, pero los demócratas se han impuesto en los estados que tenían previstos y, además, han obtenido un puesto crucial en Pensilvania.

Del resultado de las contiendas que todavía están por decidir -Georgia, Nevada y Arizona- dependerá en gran parte la percepción final de estas elecciones.

Ron DeSantis en la noche electoral de este martes cuando se dirigió a sus seguidores.
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Ron DeSantis logró la reelección como gobernador de Florida.

Un referendo sobre Biden

Las dos cámaras del Congreso han estado bajo control demócrata en los dos primeros años de mandato del presidente Joe Biden.

Si finalmente hay un cambio de control partidista, eso afectaría a la agenda de Biden, que podría ver bloqueadas sus iniciativas.

Normalmente las elecciones de mitad de período son un referendo a la gestión del presidente y suelen ser negativas para el partido que controla la Casa Blanca.

Biden tiene bajos niveles de aprobación (alrededor del 45%) y la alta inflación en el país, el gran tema para muchos electores, juega en contra del partido en el gobierno.

Elecciones para el Senado
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Pero las primeras encuestas a boca de urna también mostraron que para 3 de cada 10 votantes el aborto fue la cuestión más importante. Esto podría haber beneficiado a los demócratas, tras la decisión de la Corte Suprema de Justicia de EE.UU. -de mayoría conservadora- de eliminar el derecho constitucional a la interrupción del embarazo en todo el país.

Los resultados definitivos tardarán en conocerse porque hay partes del país en los que el conteo de votos apenas ha comenzado y en varios estados puede demorarse días, sobre todo para las disputas más igualadas.

En un clima de gran polarización y de dudas sobre el funcionamiento de las elecciones, el FBI dijo que no se han denunciado problemas significativos, violencia, amenazas ni intimidación.


Qué sabemos hasta ahora

  • No hubo "ola roja" hasta ahora a favor de los republicanos, algo que algunos aventuraban
  • Dada la baja popularidad de Biden y la alta inflación, los demócratas están conteniendo daños, según los resultados que se conocen hasta ahora
  • El gobernador de Florida, Ron DeSantis, que podría ser rival republicano de Donald Trump por la Casa Blanca en 2024, ha logrado una victoria clara por la reelección
  • Florida y el condado de Miami-Dade, tradicional refugio demócrata, se confirman ahora como bastiones republicanos
  • El demócrata John Fetterman se proyecta como ganador en la carrera por el Senado en Pensilvania, una de las batallas clave por el control del Senado
  • Las peleas más determinantes aún son demasiado inciertas como para proyectar ganadores, sobe todo en el Senado, donde existe un equilibrio de 50-50
  • La Cámara de Representantes regresaría a control republicano, según las proyecciones
  • Hay ya varios hitos en la elección: la primera gobernadora de la historia abiertamente lesbiana, Maura Healey (Massachusetts), y el primer congresista de la generación Z, Maxwell Frost (Florida), de origen cubano.

Qué no sabemos aún

  • El control del Senado es incierto y tardará en haber un desenlace. El resultado de las cruciales carreras en Nevada y Georgia podrían tardar días. En el caso de Georgia incluso podría haber una nueva elección el 6 de diciembre si ninguno de los dos principales candidatos llega ahora el 50% de los votos
  • La dimensión del triunfo republicano en la Cámara de Representantes. El margen, si se confirma el cambio de mando, es importante para su eventual oposición a Biden
  • Si Donald Trump puede realmente considerarse un ganador pese a no estar en la boleta. Algunos de los republicanos que él respaldó ganaron, pero otros perdieron, por lo que aún hay que esperar a hacer el balance final

Incluso una pequeña mayoría republicana en el Congreso cierra la puerta a las iniciativas de Biden

Análisis de Anthony Zurcher, corresponsal de la BBC en EE.UU.

Parece probable que los republicanos, como se predijo ampliamente, tomen el control de la Cámara de Representantes cuando comience el nuevo Congreso a principios del próximo año.

Si es así, la pregunta es qué tan grande es la mayoría que podrían tener.

Casi como una gran tormenta, una verdadera ola electoral puede desalojar a algunos políticos que se suponía que iban a mantener sus escaños. Es el momento de esperar sorpresas.

Pero incluso si los republicanos terminan con solo una pequeña mayoría en la Cámara, se cerrará la puerta a la agenda legislativa de Joe Biden para los próximos dos años. Esto generará un nivel de intensa supervisión del Congreso que el presidente ha evitado hasta ahora.


Qué hay en juego

  • Los 435 puestos de la Cámara de Representantes y 35 de los 100 del Senado, además de gobernadores y otros cargos locales
  • Los republicanos sólo necesitan recuperar 5 puestos para volver a controlar la Cámara, algo que prevén las encuestas. En el Senado hay igualdad de fuerzas (50-50 y decide el voto de la vicepresidenta del país, la demócrata Kamala Harris), por lo que cualquier cambio desnivela la balanza en la cámara alta
  • Los resultados definitivos podrían tardar en conocerse días o incluso semanas. Eso se debe a varios factores, como, por ejemplo, lo ajustado que son algunas carreras, que haya resultados disputados y la posibilidad de recuento. Otros retrasos se pueden deber al sistema descentralizado en el que los estados tienen su propias normas
  • Si los republicanos toman el control de las dos cámaras del Congreso, hasta hoy en manos demócratas, podrán bloquear la agenda del presidente Joe Biden y llevar adelante la suya. El apoyo económico a Ucrania y una ley nacional que restrinja el aborto podrían estar sobre la mesa
  • La inflación, que es la mayor en Estados Unidos en los últimos 40 años, y la baja popularidad del presidente Biden juegan en contra de los demócratas. Las elecciones de mitad de período suelen ser negativas para el partido que está en la Casa Blanca
  • El triunfo de los candidatos republicanos respaldados por Donald Trump podría ser una validación del expresidente, que ya adelantó que la próxima semana hará un "gran anuncio", posiblemente su intención de presentarse a las presidenciales de 2024
  • Muchos ven estas elecciones como un test a la confianza en la democracia de Estados Unidos. Algunos republicanos que buscan estar en la Cámara han manifestado dudas sobre el resultado de las elecciones de 2020. También lo han hecho candidatos a cargos locales que podrían estar a cargo de futuras elecciones

¿Qué significa que haya un gobierno dividido?

Un gobierno dividido se refiere a una situación en la que una o ambas cámaras del Congreso de EE.UU. están controladas por un partido que se opone al presidente en ejercicio, algo que parece que podría pasar a partir de estas elecciones.

Este tipo de gobierno es común en el país norteamericano desde la década de 1970. El más reciente fue durante los últimos dos años de presidencia de Donald Trump, cuando los demócratas controlaban la Cámara.

Algunas personas apoyan un gobierno dividido porque significa que cada partido político puede vigilar al otro, por ejemplo, controlando medidas de gasto no deseadas o bloqueando ciertos proyectos para que no se conviertan en ley.

Además, con las cámaras divididas se puede obligar a los legisladores a redactar leyes que tengan una base de apoyo más amplia, lo que las hace más difíciles de deshacer cuando el poder cambia de manos. En esta situación, la cooperación genera estabilidad política.

Pero cuando los partidos están polarizados en sus posiciones, un gobierno dividido puede hacer que sea imposible que un partido apruebe la legislación, lo que lleva a un estancamiento.

Centro de votación.
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