La decisión de la compañía de helados Ben & Jerry's de no comercializar sus productos en los asentamientos judíos en Cisjordania y Jerusalén Este causó una fuerte reacción del gobierno israelí que ha llegado, incluso, a los mercados de Estados Unidos.

30 de julio de 2021, 6:58 AM
30 de julio de 2021, 6:58 AM
Tienda deBen & Jerry's en Israel
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Ben & Jerry's quiere permanecer en Israel, pero su decisión de no comercializar sus productos en los asentamientos puede afectar todo su negocio en ese país.

El conflicto de Medio Oriente entre israelíes y palestinos entró en las últimas semanas en una etapa fría o, mejor dicho, helada, después de que la empresa Ben & Jerry's informara hace unos días que dejará de comercializar sus populares helados en los asentamientos judíos en Cisjordania y Jerusalén Este, porque este negocio "es incompatible" con sus valores.

Ben & Jerry's informó de su intención de continuar en Israel, pero no en esos 140 asentamientos calificados como ilegales por la mayoría de la comunidad internacional y considerados por Israel como "territorios en disputa".

En estos territorios, que Israel se fue anexionando tras la guerra de 1967, viven más de 600.000 judíos.

La empresa, basada en el estado de Vermont, en Estados Unidos, fue adquirida por el conglomerado británico Unilever en el año 2000, pero como parte de la compra, la compañía de helados mantuvo su independencia para promover sus políticas de justicia social.

Así lo recordó el director ejecutivo de Unilever, Alan Jope, luego de la decisión tomada por Ben & Jerry's, aunque insistió que el conglomerado británico continuaba "totalmente comprometido" con sus negocios en Israel, lo que fue interpretado como una forma de distanciarse de la medida de la compañía estadounidense.

Sin embargo, el primer ministro israelí comunicó a Unilever que habrá consecuencias legales. Naftali Bennet advirtió que su gobierno tomará "acciones contundentes".

"Terrorismo"

La reacción de Bennet no es la única que se ha dado dentro del gobierno israelí. El presidente Isaac Herzog calificó la medida de Ben & Jerry's como "una nueva forma de terrorismo".

Por su parte, el ministro de Relaciones Exteriores, Yair Lapid, dijo que se trata de una "capitulación deshonrosa" de la empresa al antisemitismo y al movimiento Boicot, Desinversión y Sanciones (BDS por sus siglas en inglés), que llama a boicotear a Israel por los asentamientos en territorios ocupados y por su trato hacia los palestinos.

Este movimiento ha calificado la postura de Ben & Jerry's como "un paso decisivo para terminar con la complicidad de la compañía con la ocupación israelí y la violación de los derechos palestinos".

Tienda deBen & Jerry's en Israel
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Otras compañías internacionales que intentaron separar la realidad de los asentamientos con la de Israel tuvieron que dar marcha atrás.

El ministro Lapid ya anticipó que solicitará a los 35 estados de Estados Unidos que aprobaron leyes contra el BDS que las apliquen en contra de la compañía de helados.

El periodista basado en Tel Aviv Barak Ravid escribió en el sitio de noticias Axios que la preocupación del gobierno israelí radica en que otras compañías internacionales tomen medidas similares para diferenciar el territorio del Estado de Israel del de los asentamientos.

Palabra de los fundadores

En una columna de opinión en el diario New York Times, los fundadores de Ben & Jerry's, BennettCohen y Jerry Greenfield, recordaron -primero- que son judíos y -segundo- que tras la fundación de la compañía en 1978 uno de los primeros mercados internacionales en los que incursionaron fue Israel.

"Sin embargo, es posible apoyar a Israel pero no algunas de sus políticas, de la misma manera que nos oponemos a algunas políticas del gobierno estadounidense. Por lo tanto, apoyamos sin ambigüedades la decisión de la compañía de terminar con sus negocios en los territorios ocupados", escribieron.

Ni Cohen ni Greenfield tienen ningún control actual sobre la empresa, pero ambos consideraron que la medida es una de las decisiones "más valientes" que ha tomado la compañía en sus 43 años de historia.

Añadieron en su columna que no se trata de un boicot a Israel y que Ben & Jerry's no apoya el movimiento BDS.

La empresa de helados es popular en Israel y en el resto del mundo, donde sus ventas superan los US$1.000 millones.

Tienda deBen & Jerry's en Israel
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Ben & Jerry's quiere permanecer en Israel, pero su decisión de no comercializar sus productos en los asentamientos puede afectar todo su negocio en ese país.

El debate interno

En Estados Unidos, donde nació como un negocio independiente, Ben & Jerry's es vista por muchos como un símbolo liberal, debido a sus campañas a favor de la igualdad racial, los derechos LGBT y su lucha contra el cambio climático.

Durante la presidencia de Donald Trump lanzaron, incluso, un sabor ("Pecan Resist") en contra de las políticas del exmandatario.

Para Alex Kane, periodista del sitio de noticias Jewish Currents basado en Estados Unidos, la decisión de Ben & Jerry's "tiene más consecuencias en el debate político estadounidense que en el conflicto palestino-israelí".

"Muestra que entre los liberales estadounidenses, cada vez hay menos intención de ser cómplices de la ocupación", escribió Kane en Twitter.

Pero esta no es la única reacción en Estados Unidos. Según informó la agencia Reuters, la cadena de supermercados Morton Williams anticipó que reducirá drásticamente la cantidad de productos de Ben & Jerry's en sus góndolas.

Otras compañías como Gourmet Glatt y Cedar Market comunicaron por internet que no comercializarán más la marca con efecto inmediato.

Las críticas a la medida también llegaron desde la política estadounidense. El gobernador de Texas, Greg Abbott, dijo que la decisión de Ben & Jerry's "es un insulto al aliado más cercano de Estados Unidos en Medio Oriente".

Por su parte, el gobernador de Florida, pidió que se estudie la inclusión de Ben & Jerry's y Unilever en la lista de compañías que boicotean a Israel, lo que supondría que el estado no podría invertir en dichas empresas.

Aibnb en los asentamientos
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Esta casa ubicada en un asentamiento judío es promocionada en Airbnb.

Antecedentes

En 2018, la compañía Airbnb declaró que retiraría de sus listas de alojamientos todos los que estuvieran dentro de los asentamientos judíos de Cisjordania.

La medida fue bienvenida por la organización Human Rights Watch, como un "gran avance", sin embargo, meses después Airbnb revirtió esta decisión.

Según su sitio web, ahora la compañía realiza un análisis "caso por caso".

El director de la Campaña de Solidaridad con Palestina, Ben Jamal, cree que el paso atrás se debió a la presión de Israel y de los grupos proisraelíes en EE.UU.

La pregunta ahora es qué ocurrirá con los helados Ben & Jerry's en una región tan caliente como el Medio Oriente.


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