La hija mayor del presidente de EEUU permaneció seis semanas en el país. Estuvo en Cochabamba y La Paz

El Deber logo
18 de enero de 2017, 5:00 AM
18 de enero de 2017, 5:00 AM

La joven pasó desapercibida, pese al gran operativo que existió para su seguridad. Malia, la hija mayor del presidente de Estados Unidos (EEUU), Barack Obama, recorrió las calles de La Paz y Cochabamba sin ningún inconveniente e incluso se animó a escalar parte de la Cordillera Real. Fotografías revelan parte de su estadía.

27 personas conformaron la delegación estadounidense, 17 jóvenes y guías, junto con 10 marines de un equipo élite. Permanecieron cerca de seis semanas en territorio nacional.

El grupo se hospedó en el hostal Austria, a una cuadra de Palacio de Gobierno. En diciembre contactaron a la agencia de turismo de aventura Bolivian Mountain Guides para realizar un tour de cuatro días, desde el lago Khotia hasta el Huayna Potosí. Una caravana de nueve motorizados, algunos de la embajada de EEUU y otros de la Policía boliviana, estuvieron durante el operativo.

Eduardo Mamani, responsable del recorrido, comentó a EL DEBER que no existió pedidos singulares, salvo que dos cocineras acompañaran a la delegación para asegurar la alimentación de los marines. Resaltó que la joven se veía alegre y sorprendida por la belleza del país.

Estadía en Cochabamba
El alcalde del Tiquipaya, Juan Carlos Angulo, reveló que durante su estadía se duplicó el contingente policial. En ese municipio la mayor de las Obama realizó actividades culturales y de voluntariado medioambiental. “Ha sido una visita clandestina, por seguridad, tal vez, no daban a conocer a donde se dirigían”, explicó.

Según Los Tiempos de Cochabamba, Malia siguió los comicios de EEUU del 8 de noviembre desde la pizzería Villa Esperanza en Tiquipaya, junto con un grupo de 60 personas. Un cliente reservó el salón de la pizzería para ver los comicios en vivo, contó Sara Ormas, hija  de la dueña de la pizzería