Luego de un proceso de dos años se da el reconocimiento, justo en el Día Internacional de los Derechos Humanos. Con esta medida administrativa se da cumplimiento a una sentencia de la sala constitucional segunda de La Paz

10 de diciembre de 2020, 21:05 PM
10 de diciembre de 2020, 21:05 PM

David Aruquipa y Guido Montaño ya son reconocidos como unión libre por el Servicio Nacional del Registro Cívico (Sereci). Han pasado dos años de disputas legales hasta lograrlo, justo en este 10 de diciembre que se conmemora el Día Internacional de los Derechos Humanos.

La resolución del Sereci valida la inscripción como unión libre, situación que equipara los derechos civiles de la pareja a los de cualquier otra pareja. La abogada que llevó la causa, Mónica Bayá, considera que la resolución acata la sentencia de la sala constitucional segunda de La Paz para que se registre esta unión, sentencia que data del 3 de julio 2020.

Bayá explica que, con este registro, la pareja adquiere “los mismos derechos que las parejas tradicionales: cobertura sanitaria por la seguridad social, acceder a un crédito o permitir la sucesión hereditaria”.

Por su parte, David Aruquipa, uno de los beneficiados por la resolución, explica que se “hace justicia con nuestra relación de 11 años”. Califica el hecho como “una conquista más que marcará un precedente, un hecho histórico en Bolivia”.

La abogada celebra este paso significativo que, seguramente, “sirve de precedente para futuras parejas”. Espera, además, que sirva de aliciente para que la Asamblea Legislativa “modifique el código de las familias que es el que expresamente restringe las uniones del mismo sexo”.

Por su parte, Aruquipa considera que a partir de este reconocimiento sea el Tribunal Constitucional quien se pronuncie a favor de la unión libre sin impedimento, como un derecho humano. “Estamos en un Estado de derecho y se trata de reconocer los derechos de un grupo social que han sido violentados históricamente”.

Tras la resolución del Sereci, amparada en una sentencia jurídica, corresponde al Tribunal Constitucional disponer las medidas de carácter general que regirán para otras parejas.

Mónica Bayá aprovecha la resolución para recordar que “los derechos no pueden quedarse en el papel, sino que deben plasmarse en situaciones prácticas”.  También agrega que esta aprobación no afecta en nada a quienes se oponen a la equiparación de derechos puesto que “ellos tienen todos los derechos que se nos otorgan ahora”.

Reacciones

Desde la Universidad de la Familia, Víctor Hugo Áñez, considera que esta resolución que reconoce la unión libre "es un paso por parte del colectivo LGBT para que sean reconocidas como familiar natural". Valora que se protejan sus derechos civiles, pero destaca que éstos pueden ser respaldados por leyes, sin necesidad de concretar el matrimonio.

De acuerdo a los principios cristiaños, Áñez señala que estas uniones "violan la ley de Bolivia y la ley de Dios y no podemos ir contra de ello". Para los creyentes, el matrimonio bajo el modelo de Dios cosiste en la unión entre un un hombre y una mujer.

Desde la mirada evangélica, preocupa "la motivación final que mueve a estos reconocimientos". Áñez reitera que su propósito consiste en equipararse al matrimonio religioso por encima de la confirmación de sus derechos.