En San Miguelito no hay atención en salud ni profesores, menos, servicios básicos, porque se oponen a la coca

17 de abril de 2023, 7:27 AM
17 de abril de 2023, 7:27 AM


En la comunidad San Miguelito, al sur del Territorio Indígena Parque Naciones Isiboro Sécure (Tipnis), hacen fuerza para que los cocales no ingresen a su área: las plantaciones están al frente del poblado a solo cinco kilómetros. La coca sobrepasó la línea roja de la reserva natural y el denominado Polígono 7 -al sur de la reserva- se convirtió en sindicatos cocaleros con presencia de indígenas. Ese rechazo a los cocales también generó que esa comunidad, y otras más, sean desatendidas por el municipio de Villa Tunari, que está en el trópico cochabambino. 

Eleuterio Semo es dirigente de la comunidad San Miguelito, que está al sur del Tipnis. La autoridad indígena expresó a este medio su preocupación por el crecimiento de cultivos de coca en el sur del Tipnis. Semo detalló que las plantaciones ya están en las comunidades de Puerto Sucre, Puerto Liberación, Ismael Montes y Puerto Zudáñez. El dirigente explicó que ese rechazo a las plantaciones de coca les pasó factura: no son atendidos ni por el Gobierno central ni por el municipio de Villa Tunari. 

“En el Polígono 7 hay comunidades indígenas y están mezclados con colonos. En esa parte se han reconocido los cultivos de coca y acá en nuestras comunidades no se permite la coca. Por no aceptar las plantaciones de coca nos han cortado todo, el municipio de Villa Tunari nos cortó todo. La coca está acá al frente, ya están en sindicatos, están a cinco kilómetros de nuestra comunidad (San Miguelito)”, afirmó Semo. 

Sin servicios básicos

La autoridad indígena detalló que la escuela no tiene funcionamiento permanente y que no hay atención en salud. Incluso dijo que los servicios básicos son un sueño para la comunidad San Miguelito, pero que será muy difícil de cumplirlos porque no aceptan las plantaciones de coca. 

La situación en el Tipnis no tiene control riguroso contra las plantaciones de coca. En zonas del sur del área protegida está prohibido el cultivo de la hoja; sin embargo, eso no se cumple. La coca se expandió a comunidades indígenas, como los yuracarés en el Conisur, donde está el Polígono 7. Un caso de estos es Puerto Zudáñez, donde las plantaciones están a punto de llegar a comunidades como San Miguelito, Santa Teresa, Buen Pastor, Mercedes Lojota, Santísima Trinidad y 3 de Mayo.

En el Tipnis habitan entre 3.500 y 4.000 indígenas de los pueblos mojeño, yuracarés y chimanes, que son los protectores de este hábitat. Gonzalo Colque, de la Fundación Tierra, resaltó las diferencias que existen entre las TCO Tipnis y la zona cocalera al interior del parque: el principal es el poderío económico de los cultivos en la franja de cocaleros que es de 7.000 a 8.000 hectáreas que contrasta con las comunidades indígenas. Por tanto, interviene el factor político representado por el Consejo Indígena del Sur (Conisur) en el sur del Tipnis, detalló.

En el Polígono 7 está permitido el cultivo de hoja de coca hasta un cato (1.600 metros cuadrados) por productor. Se basan en las mismas reglas de Chapare. Y en el suelo indígena, más allá de la zona colonizada del Tipnis, no está permitida la producción de coca.