Tras el partido contra Panamá, la Verde, cerró su participación en la Copa América y deberá enfocarse de lleno en el reinicio de las Eliminatorias Sudamericanas

1 de julio de 2024, 23:00 PM
1 de julio de 2024, 23:00 PM

La selección boliviana, dirigida técnicamente por Antonio Carlos Zago se despidió este lunes del torneo de la Copa América, luego de caer ante Panamá (2-1), en un duelo correspondiente a la última fecha del Grupo C, que se disputó en el estadio Inter&Co de Orlando, Florida.

El desempeño del conjunto nacional dejó mucho que desear, ya que a lo largo del torneo no dio señales de que podía competir, más al contrario, demostró que solo asistió a participar. Así de dura y cruel es la realidad de la Verde, que una vez más expuso su pobre nivel de competencia a nivel internacional.


Existen varios puntos a examinar tras la eliminación de Bolivia, y aquí, en el Deber Sports, te presentamos un análisis detallado de cada incógnita que generó el equipo de Zago.

¿Zago no encuentra su equipo?

En un principio parecía que el entrenador brasileño tenía su base definida, sin embargo con el pasar de los partidos demostró tener muchas dudas en el armado de sus oncenos titulares. Los que habitualmente figuraban como inamovibles fueron relegados al banco de suplentes, aunque luego volvieron a tener minutos desde el inicio.

¿Al final, línea de 3 o línea de 4?

Esta es una de las preguntas más comunes que se hacen los seguidores de la Verde: ¿cuál será el esquema táctico que utilizará la selección? Zago, rotó mucho, en algunas oportunidades paró la tradicional línea con 4 defensores, pero al no tener resultados optó por cambiar a una línea de 3. Incluso, en algunos partidos jugó un tiempo con cada sistema. Hasta el momento no se ha logrado evidenciar cuál es el que mejor se ajusta a la selección.

Fragilidad defensiva:

La selección boliviana se ha mostrado muy débil en defensa, zona en la que se ha visto rebasada por los delanteros de los demás equipos. La velocidad y el cambio de ritmo de los atacantes contrarios dificulta aún más la labor de los defensores nacionales, quienes se ven claramente superados por sus adversarios.

Mediocampo desorientado

En este sector parecía que la Verde tendría menos problemas, pero no fue así. La poca tenencia de balón y la falta de individualidades ha hecho que el medio campo de Bolivia carezca de ideas. Genera muy poco y no logra alimentar a los delanteros.

Ataque sin peligro

Quizás una de las posiciones más difíciles. Los delanteros de la Verde corren con la responsabilidad de suplir el vacío que dejó Marcelo Martins, pero hasta la fecha, la mochila parece ser demasiado pesada. En ataque, da la sensación que no generará peligro, es más, las aproximaciones en la Copa América han sido pocas, las más claras: algunos remates de media distancia que fueron al medio, directo a las manos del arquero.

Con las Eliminatorias Sudamericanas en el horizonte, Zago enfrenta el desafío de corregir rápidamente los errores y encontrar una identidad de juego para la Verde. El tiempo apremia, y Bolivia necesita urgentemente mejorar su competitividad a nivel internacional.