El coronavirus, detectado hace dos años y declarado pandemia mundial en marzo de 2020, ya ha causado el fallecimiento de más de 5,4 millones de personas. Sistemas de salud al borde del colapso, advierte OMS

31 de diciembre de 2021, 8:01 AM
31 de diciembre de 2021, 8:01 AM

Millones de personas en todo el mundo se preparaban ayer para unas celebraciones de Año Nuevo drásticamente limitadas por la propagación fulgurante del covid-19, que en la semana del 23 al 29 de diciembre sobrepasó el hito simbólico del millón de contagios diarios.

En los últimos siete días, se detectaron de media 1.045.000 nuevas infecciones diarias, un 46% más que la semana anterior, según un recuento de AFP de ayer establecido a partir de balances oficiales.

El coronavirus, detectado hace dos años y declarado pandemia mundial en marzo de 2020, ya ha matado a más de 5,4 millones de personas, desencadenado crisis económicas y obligado a las sociedades a vivir entre confinamientos intermitentes.

Hasta ahora, la explosión de casos no se ha traducido en un aumento del número de muertos, que desciende desde hace tres semanas en el mundo.

Pero la variante ómicron, si bien se considera que provoca síntomas más leves que las anteriores cepas, ha elevado la infección a niveles récord en los últimos días.

De México a Grecia y de Francia a Brasil, el fuerte repunte está obligando a los gobiernos a reimponer restricciones.

‘La música, prohibida’

”La música estará prohibida” en bares y restaurantes, que cerrarán a medianoche y a las 2 el 31” advirtió el ministro griego de Salud, Thanos Plevris, para tratar de limitar las ganas de salir de sus compatriotas en ocasión del cambio de año.

El país heleno registró un nuevo máximo de contagios diarios el miércoles, en la senda de otros países llevan días batiendo su máximo de casos diarios en la pandemia como Francia, Reino Unido o España.

En España, los festejos públicos se cancelaron en la mayoría de ciudades grandes, excepto Madrid, donde está programada una celebración pública limitada a 7.000 personas, en comparación con las 18.000 en 2019 antes de que la pandemia azotara Europa.

Las discotecas estarán cerradas en Francia durante varias semanas y los bares de copas de París deberán echar la persiana a las 2 de la madrugada, al tiempo que, a partir del viernes, será obligatorio llevar mascarilla en exteriores para todos los mayores de 11 años.

En Ciudad de México y Sao Paulo, las autoridades anularon las celebraciones de Año Nuevo por el coronavirus.

Mientras, en Río de Janeiro, la mítica playa de Copacabana, que en Año Nuevo reúne normalmente a más de 3 millones de personas, este año verá limitado su aforo, no celebrará conciertos y los tradicionales fuegos artificiales se dispararán en nueve emplazamientos distintos de la ciudad para evitar una excesiva concentración de público.

Restricciones similares se multiplican por numerosos países del mundo ante la altamente contagiosa nueva variante.

El jueves, el Servicio Nacional de Salud de Gran Bretaña anunció que comenzaría a abrir hospitales de campaña temporales para contener un posible exceso de pacientes hospitalizados en Inglaterra.

‘Al borde del colapso’

”Los sistemas de salud están al borde del colapso”, alertó el director de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus.

El repunte de infecciones también ha alcanzado a Estados Unidos, que registró un máximo histórico de más de 265.000 casos diarios, y a América Latina y el Caribe.

La región americana acumula ahora más de 47 millones de infecciones y cerca de 1,6 millones de muertes.

En China, los residentes de la ciudad de Xi’an, donde 13 millones de personas permanecen confinadas, los habitantes se quejaban de no encontrar suficientes alimentos, a pesar de que Pekín aseguró que la situación estaba controlada.

La televisión estatal mostró imágenes de trabajadores con trajes de materiales peligrosos clasificando huevos, carne y verduras, antes de entregar comida a los residentes de puerta en puerta.

“Vivo con ... un tazón de avena todos los días, solo para mantenerme con vida”, dijo a la AFP una residente de apellido Wang.