Con menos de 6.200 casos positivos y 110 muertes atribuidas oficialmente al Covid-19, la baja virulencia del virus en Haití ha sido una "feliz sorpresa" para las autoridades

4 de julio de 2020, 7:50 AM
4 de julio de 2020, 7:50 AM

Las escuelas en Haití, cerradas desde mediados de marzo debido a la pandemia de Covid-19, reabrirán el 10 de agosto, anunció el viernes el presidente del país, Jovenel Moïse, quien también formalizó la reanudación de los servicios religiosos el 12 de julio. 

"Siguiendo las recomendaciones de las autoridades de salud y la unidad científica sobre las medidas de prevención que deben respetarse para la reapertura gradual del país, anunció para el 12 de julio la reanudación de los servicios religiosos. Las escuelas y universidades se reanudarán el 10 de agosto", tuiteó el mandatario.

Tras el descubrimiento de los primeros dos casos de nuevos coronavirus en su territorio el 19 de marzo, Haití decretó el cierre de todas las escuelas y universidades.

Antes de la interrupción por la pandemia, el año académico 2019-2020 ya había sido afectado por disturbios socioeconómicos durante el otoño boreal y el mes de enero.

El anuncio sobre la reapertura de la escuelas no estuvo acompañado de ningún detalle sobre revisiones en el calendario escolar.

Los vuelos comerciales también se habían suspendido a mediados de marzo, pero los primeros volvieron el miércoles, luego de que las autoridades ordenaran la reanudación de las operaciones en los dos aeropuertos internacionales del país. 

En un discurso televisado el lunes, el presidente haitiano anunció que, además del regreso del tráfico aéreo internacional, los cuatro puntos fronterizos oficiales con República Dominicana serán reabiertos el 30 de junio. 

Sin embargo, el miércoles el Ministro de Salud dominicano indicó, según la prensa local, que la reapertura de fronteras se abordaría "en la próxima reunión de alto nivel" con el jefe de Estado dominicano, sin especificar la fecha. 

Con menos de 6.200 casos positivos y 110 muertes atribuidas oficialmente al Covid-19, la baja virulencia del virus en Haití ha sido una "feliz sorpresa" para la comunidad médica, que temía un fuerte impacto en el país de infraestructura hospitalaria deficiente.