Muere de Covid-19 periodista hondureño preso por "calumnias"
David Romero murió de Covid-19 días después de ser internado en un hospital. Cumplía una pena de diez años por "calumnias constitutivas de difamación"
El periodista hondureño David Romero, que estaba preso desde marzo de 2019 por "calumnias", murió este sábado en un hospital capitalino, días después de ser internado con Covid-19, informó radio Globo.
"Don David Romero ha muerto. Hace unos minutos recibimos la comunicación oficial de nuestra compañera Lidieth Díaz", esposa del comunicador, dijo el periodista Gustavo Blanco.
Romero, de 65 años, fue director de Globo. El periodista fue internado el 5 de julio en el Hospital Cardiopulmonar, más conocido como el Tórax, donde le confirmaron que tenía Covid-19.
El periodista fue ingresado en cuidados intensivos del hospital, luego de ser trasladado desde el Segundo Batallón de Infantería, 10 km al norte de la capital, estaba en una celda habilitada por las autoridades, en la que cumplía una condena de 10 años de prisión por "calumnias constitutivas de difamación".
Fue capturado el 28 de marzo de 2019 por policías en la radio, donde se había atrincherado.
El periodista señaló públicamente al presidente del país, Juan Orlando Hernández, de presionar a la justicia para que lo encarcelaran, en represalia por denunciarlo en presuntos vínculos con actos de corrupción.
Romero denunció el saqueo de unos 330 millones de dólares del Seguro Social, lo que provocó manifestaciones de decenas de miles de personas contra el Gobierno.
Hernández reconoció que decenas de miles de dólares fueron a parar a su campaña que lo llevó al poder en el primer periodo de gobierno 2014-2018. El mandatario aseguró que no supo de este movimiento de dinero.
Romero se inició en periodismo en el diario La Tribuna y luego trabajó en radio América. Incursionó en la política con el Partido Liberal y llegó a ser diputado durante el Gobierno de Manuel Zelaya (2006-2009).
Después del golpe en 2009, participó en las manifestaciones de miles de personas en demanda del regreso de Zelaya.
Cuando estudiaba en la Universidad Nacional en los años 80, Romero fue dirigente de la izquierdista Unión Revolucionaria del Pueblo (URP), una agrupación política que tenía su brazo armado.
