“Ninguna familia con hambre” es la meta del Banco de Alimentos Solidarios

Un video anónimo, de esos que circulan por los grupos de WhatsApp, se expandió rápidamente. En poca más de una hora, se replicaba insistentemente el mensaje de un joven desconocido, cubierto por un barbijo, que convocaba a la solidaridad. Hay familias que pasan hambre y no tienen con qué abastecerse, clamaba el anónimo portavoz, pero está en nosotros ayudarlas para que sigan cumpliendo la cuarentena, proponía. La idea era sencilla, comprar un poco más de lo necesario y depositarlo, en calidad de donación solidaria, para que llegue a estas familias.

La mañana siguiente, los supermercados ya disponían de espacios para el acopio de donaciones, las empresas privadas gestionaban sus aportes y, desde las autoridades, se agilizaban los trámites. El Banco de Alimentos Solidario surgía como una respuesta común de ayuda a los más necesitados.

El Secretario de la Gobernación de Santa Cruz, Vladimir Peña, valora los aportes que se reciben desde todos los sectores de la población. “La iniciativa público-privada complementa los subsidios que ofrece el Gobierno como la canasta familiar y el bono familia” ratifica Peña. El Banco de Alimentos Solidario se presenta “con una cobertura ampliar para atender a los que quedan fuera de los bonos”.

El anuncio por parte del ejecutivo nacional de la entrega de dos bonos solidarios generó incertidumbre en los sectores que no estaban incluidos como beneficiarios. Las parejas jóvenes, los cuentapropistas o los emprendedores no asalariados se convertían en personas vulnerables ante la cuarentena sanitaria dispuesta por el gobierno. La gestión público- privada con iniciativas que fortalecen la cooperación y solidaridad permiten atender a estos sectores y expandir los beneficios a una gran parte de la población. Según expresa Vladimir Peña, “el gobernador ha dispuesto que ninguna familia esté con hambre”.

Para el Secretario de la Gobernación, el respaldo de la Asamblea Legislativa Departamental agiliza la puesta en marcha del Banco de Alimentos. De manera urgente, la Asamblea “ha dispuesto una normativa que autoriza el uso de recursos de forma extraordinaria para que el tema económico no sea un limitante”. De esta manera, valida la autoridad “todo el dinero que sea necesario en tema médico, sanitario y de alimentación” será destinado para la atención de los ciudadanos.

El Comité de Operaciones de Emergencia Departamental (COED) está trabajando para integrar los aportes que se reciben del sector público y privado. A diario, los tres niveles de gobierno (nacional, departamental y municipal) se reúnen para consolidar soluciones que frenen la expansión de infecciones. En las reuniones participan otras instituciones públicas junto a representantes del sector privado.

CAINCO respalda la urgencia de un Banco de Alimentos Solidario como una iniciativa necesaria para atender las dificultades de la población. Junto a sus afiliados, ha impulsado la página web Demos de Corazón para que tanto empresas como la sociedad civil puedan realizar aportes solidarios. La lista de requerimientos que propone el Banco de Alimentos Solidarios contiene sugerencias sobre alimentos no perecederos y productos de limpieza que cubran las necesidades básicas de las familias cruceñas.

El COED resalta la solidaridad cruceña que, diariamente, entrega productos en los 35 supermercados que cuentan con puntos de acopio para el Banco de Alimentos Solidario. Además, desde la línea gratuita 800-120909 se puede coordinar la entrega de donaciones para que voluntarios y personeros de la gobernación puedan recogerlo desde los domicilios.

Peña confía en que la ayuda llegue a todos los rincones del departamento. Están trabajando con la Asociación de Municipios de Santa Cruz (AMDECRUZ) para elaborar una base de datos que incluya a todas las personas mayores de 18 años que no recibirán los bonos. La logística de distribución se está coordinando con cada municipio y se plantea pedir la ayuda de Defensa Civil y el Ejército para que la ayuda sea entregada directamente a los beneficiarios.

Alcance de las ayudas

. Canasta familiar: pago único de 400 bolivianos para adultos mayores de 60 años que no reciben el beneficio de la jubilación, el bono se sumará a la renta dignidad; para mujeres en gestación o lactancia que reciben el bono Juana Azurduy; y personas con capacidades diferentes que estén incluidas en los registros municipales.

. Bono familia: comprende un pago de 500 bolivianos por hijo que curse inicial y primaria en centros educativos públicos. Para el pago se utilizará la base de datos del bono Juancito Pinto.

. Banco de Alimentos Solidario: complementa las ayudas anteriores para alcanzar a las personas mayores de 18 años que no son asalariadas ni funcionarios públicos, que no reciban ningún tipo de renta. La ayuda está dirigida a cuentapropistas, mototaxistas y trabajadores del servicio público, entre otros.

. Hogares y centros de acogida: Vladimir Peña recalca que la ayuda de la Gobernación para los centros de atención y apoyo a las personas más vulnerables está enmarcada en el sistema regular de políticas sociales. En los últimos días se ha gestionado la ayuda para la comunidad venezolana que forma parte de la población vulnerable.