La fosa fue habilitada por la Alcaldía, ante el abandono de los cuerpos y el colapso de la morgue del Hospital Obrero de la Caja Nacional de Salud. El alcalde informó que se está gestionando la implementación de dos hornos crematorios móviles y un cementerio para los muertos por el virus

28 de julio de 2020, 19:52 PM
28 de julio de 2020, 19:52 PM

Ante el abandono de 30 cuerpos de fallecidos por Covid-19 y el colapso de la morgue del Hospital Obrero de la Caja Nacional de Salud de la capital orureña,  fueron trasladados la madrugada del pasado domingo, a una fosa común habilitada por la alcaldía municipal. 

Varios de los difuntos fueron abandonados por sus familiares por temor a la enfermedad evitando un posible contagio;  otros, porque sus allegados no contaban con los recursos económicos para cubrir las exequias fúnebres (cremación). Las más afectadas son aquellas personas que contrataron los servicios de funerarias que les aseguraron que se harían cargo de todos los trámites y gestiones hasta entregarles las cenizas de sus seres queridos.

El administrador de la Caja Nacional de Salud Regional Oruro, José Verduguez, comunicó este martes que efectivamente 30 cuerpos de pacientes fallecidos a consecuencia del coronavirus fueron trasladados desde la morgue del Hospital Obrero hasta una fosa común donde finalmente fueron enterrados porque se constituían en un riesgo para la salud pública de los pacientes, personal médico, administrativo y la población en general, debido al tiempo que permanecían en la morgue del nosocomio.

El hospital estaba a punto de convertirse en un foco infeccioso, debido a que los familiares no recogían los cuerpos de los difuntos que estaban apilados unos sobre otros. "Imagínense abandonar por más de quince días los cadáveres, pasado ese tiempo los cuerpos explotan y expiden toxinas. Personalmente solicité al alcalde que nos ayude y de esa manera hemos llevado los cuerpos en camionetas y algunas ambulancias hasta un terreno que fue señalado por la alcaldía", detalló Verduguez.

El alcalde municipal de la ciudad de Oruro, Saúl Aguilar, explico que ante el colapso sufrido por el deterioro del horno crematorio del cementerio general y mientras se realiza el mantenimiento correspondiente, el gobierno municipal está implementando dos proyectos. Uno de ellos es la adquisición de dos hornos crematorios móviles que llegarán a la ciudad en los próximos días, y la habilitación de un cementerio específico para cadáveres con Covid-19, que cumpla con todos los protocolos de bioseguridad establecidos.

Aguilar dijo que ante la petición del Administrador Regional de la Caja Nacional de Salud, se puso a consideración las dos posibilidades, pero ante el colapso de la morgue y el peligro que esto contemplaba se decidió ceder un espacio de terreno  donde luego será implementado el cementerio Covid. "El Gobierno Municipal solo esta cumpliendo con sus competencias vinculadas con la ley con relación a la disposición final de cadáveres, en el ámbito específico de sus obligaciones", subrayó.

Para saber

En el transcurso de este lunes y martes varias personas denunciaron que los cuerpos de sus familiares fallecidos habían "desaparecido" de la morgue del Hospital Obrero.

La autoridad municipal precisó que no es competencia del gobierno Autónomo Municipal de Oruro el manejo y disposición de cadáveres de ningún centro hospitalario, pues por ley solo se encarga de las exequias en espacios o cementerios dispuestos para este efecto. 

Además dice que en casos en que los familiares no reclamen el cuerpo para su disposición final, se esperará máximo hasta 24 horas después del fallecimiento. Pasado este tiempo, el Municipio debe disponer de un lugar para el entierro del cadáver en una fosa común.