Luego de que el mandatario salvadoreño, Nayib Bukele, afirmara que no quería "cometer el mismo error que Costa Rica y otros países", el canciller costarricense, Rodolfo Solano, manifestó su preocupación por las declaraciones

6 de mayo de 2020, 16:18 PM
6 de mayo de 2020, 16:18 PM

Los Gobiernos de El Salvador y Costa Rica se enzarzaron este miércoles en una polémica, después de que el presidente salvadoreño, Nayib Bukele, cuestionara los bajos números de contagios detectados en el otro país centroamericano. 

Costa Rica rechazó las palabras de Bukele y defendió su gestión para contener la propagación del Covid-19.

El diferendo entre los dos países centroamericanos comenzó la noche del martes, cuando Bukele dijo en cadena de radio y televisión que El Salvador no quería "cometer el mismo error que Costa Rica y otros países". 

"Costa Rica nos daría la falsa impresión de que han aplanado la curva, pero solo han bajado la cantidad de pruebas diarias, teniendo la capacidad de hacer más", declaró Bukele.

Su comentario alude al hecho de que en Costa Rica se ha reducido fuertemente el número de contagios en el último mes, con menos de 10 por día, luego de ser el primer país centroamericano en detectar casos de coronavirus. 

"Costa Rica manifiesta su preocupación por las declaraciones del presidente de la República de El Salvador, en las que hizo referencia a las prácticas y estándares que realiza Costa Rica para la aplicación de las pruebas para la detección de Covid-19", dijo el canciller Rodolfo Solano.

Costa Rica, con cinco millones de habitantes, detectó su primer caso de coronavirus el 5 de marzo y ha registrado 761 casos, incluidos seis fallecidos, desde entonces.

El Salvador, con 6,6 millones de habitantes, detectó su primer caso el 13 de marzo y acumula 587 casos con 14 muertos.

El Salvador tiene 87 pacientes hospitalizados por el coronavirus, 17 en estado crítico, comparado con 17 hospitalizados en Costa Rica, cinco de ellos en condición crítica.

El canciller costarricense llamó a la embajadora salvadoreña, Ana Patricia Pineda, para expresarle su "preocupación" por las manifestaciones de Bukele.

La estrategia costarricense se basa en la identificación de casos sospechosos para aplicar las pruebas del coronavirus, unas 200 por día, mientras El Salvador ha optado por pruebas masivas, más de 1.000 en algunos días.