San Pablo endurece medidas para contener nueva onda letal de la pandemia

El estado de San Pablo anunció el viernes el cierre de bares y restaurantes por las noches y durante dos fines de semana, en el marco de medidas contra la pandemia que "mata a una persona cada seis minutos" en la región más rica y poblada de Brasil.

Las medidas regirán a partir del lunes hasta el 7 de febrero en la metrópolis de San Pablo y la mayoría de las ciudades del estado, declaradas en "fase roja" entre las 20:00 y las 06:00 de lunes a viernes y los sábados y los domingos durante toda la jornada.

En la "fase roja" solo se autoriza el funcionamiento de servicios considerados esenciales.

"Una segunda onda de coronavirus afecta al mundo y sus efectos se hacen sentir también en Brasil y en el Estado de San Pablo. El aumento del número de casos, de las hospitalizaciones y de los decesos es sumamente preocupante", dijo el gobernador paulista, Joao Doria, al anunciar las medidas.

"En San Pablo, hay una muerte cada seis minutos" por covid-19, subrayó el coordinador ejecutivo de la célula de lucha contra el nuevo coronavirus, Joao Gabbardo.

"El escenario de los próximos días no es tranquilizador. Al contrario, es sombrío. Hay un riesgo de que San Pablo, sin tomar las medidas necesarias, en poco tiempo no tenga más camas disponibles en las unidades de cuidados intensivos", agregó.

Doria dijo que no daría marcha atrás, pese a las presiones de sectores económicos y del presidente Jair Bolsonaro, contrario a las medidas de confinamiento por su impacto recesivo.

"Sin vida no hay economía, sin existencia no hay proceso económico que sobreviva", agregó el gobernador de San Pablo, que se perfila como uno de los principales adversarios de Bolsonaro en las elecciones presidenciales de 2022.

"San Pablo no tiene un gobierno populista (...) que abandona a sus ciudadanos", añadió.

Brasil empezó la campaña de vacunación esta semana, con seis millones de dosis de la vacuna china CoronaVac, a las que sumarán a partir del sábado dos millones de la británica AstraZeneca, destinadas a grupos de riesgo. La inmunización general de este país de 212 millones de habitantes tardará varios meses.

Brasil registra más de 214.000 muertos, 51.000 de ellos en Sao Paulo. El estado no es el más afectado proporcionalmente, aunque desde diciembre vive un fuerte repunte de casos y de óbitos.

La segunda ola en Brasil deja balances de más de mil muertos diarios, y su punto más dramático es en Manaos, la capital de Amazonas, donde decenas de personas con covid murieron asfixiadas por falta de oxígeno en los hospitales.