El sector afirma que en 2021 las empresas en Bolivia registraron un escenario de extrema iliquidez producto de la caída en sus ventas. En la pasada gestión, con datos de Fundempresa, aseguran que cerraron 5.480 firmas de las que 462 son industriales

31 de marzo de 2022, 10:28 AM
31 de marzo de 2022, 10:28 AM

Días después de que el Gobierno formalizara que el Producto Interno Bruto (PIB) del país registró el año pasado una variación positiva del 6,11% y que el ministro de Economía y Finanzas Públicas, Marcelo Montenegro, dejara abierto que “hay una probabilidad buena” de que este año se pague el segundo aguinaldo, la Cámara Nacional de Industrias (CNI), a través de su presidente Ibo Blazicevic, considera que plantear un incremento salarial o doble aguinaldo cuando la economía se encuentra por debajo del nivel de actividad de 2019 generará mayor deterioro del empleo formal y productivo y reducirá la competitividad de la producción nacional.

Días atrás, el 6,11% del PIB supera las expectativas de crecimiento para la gestión (5,1%). Datos del INE muestran que el crecimiento del PIB en el tercer trimestre de 2021 fue del 8,89%. El doble aguinaldo tendrá luz verde si el promedio del crecimiento del PIB en el tercer y cuarto trimestre de 2021 y en el primer y segundo trimestre de 2022 es mayor al 4,5%.

Blazicevic hizo notar que con la tasa de crecimiento del PIB del 6,11% en 2021, aún no se logró alcanzar el nivel de actividad económica de 2019, puesto que en 2020 -producto de la pandemia del Covid 19- la contracción del PIB fue del -8,83%. “Para igualar el nivel de actividad económica de 2019 se requirió que en 2020 la economía hubiera crecido igual o más del 11%”, infirió.

En su criterio, el sector empresarial en el mercado interno aún continuó estancado en 2021. “El crecimiento del PIB en este periodo se originó en la actividad (inversión y consumo) del sector público y la expansión del sector externo de los sectores de hidrocarburos, minerales y oleaginosas. El sector público invirtió en 2021 más de $us 4.050 millones y las exportaciones crecieron un 58%”, acotó.

En la otra vereda, dio cuenta de que las empresas privadas en Bolivia en 2021 registraron un escenario de extrema iliquidez producto de la caída en sus ventas. En la pasada gestión, según registros de Fundempresa, cerraron 5.480 empresas, de las que 462 son industriales.

En la cumbre para la reactivación económica y productiva, indicó que se planteó que la economía debe crecer en base al esfuerzo público y privado, a dos motores: generándose incentivos y condiciones de seguridad jurídica y estabilidad macroeconómica para la iniciativa privada.

“El gobierno nacional debe impulsar con mayor decisión la sustitución de importaciones, puesto que el contrabando por la devaluación de monedas en los países vecinos, el incremento de las importaciones y el encarecimiento de las materias primas por efecto de la invasión de Rusia a Ucrania generan mayor pérdida de la competitividad de la producción en Bolivia y sustitución de la producción nacional”, puntualizó Blazicevic.

El 17 de marzo, el presidente Luis Arce, recibió el pliego petitorio de la Central Obrera Boliviana. “Es un pliego petitorio que va a ser analizado, evaluado por las diferentes instancias del Gobierno con absoluta responsabilidad con todo el pueblo boliviano, sabemos que hay muchas necesidades, sabemos que hay muchas demandas, vamos a operar en las comisiones que ha mencionado el compañero Juan Carlos Huarachi. Las comisiones se van a poner en funcionamiento para poder atender y responder desde el Gobierno el pliego petitorio”, dijo el Jefe de Estado al recibir el documento.