Desde el Comité de Mujeres Emprendedoras y Empresarias (CEEB) nació una agenda con 10 pilares para trabajar a favor de uno de los sectores más vulnerables

23 de septiembre de 2020, 16:22 PM
23 de septiembre de 2020, 16:22 PM

A raíz de los problemas sociales suscitados en 2019 y la pandemia que ha sido muy letal para muchas iniciativas como micro, pequeñas y medianas empresas, que constituyen la mayoría de los emprendimientos bolivianos, ha surgido una iniciativa muy importante de parte del Comité de Mujeres Emprendedoras y Empresarias de Bolivia (CEEB).

Este comité, junto con el apoyo de Pro Mujer, identificó factores que limitan la creación de emprendimientos y el desarrollo de empresas lideradas por mujeres, y frente a estas limitantes planteó una agenda con 10 pilares en los que se puede trabajar para la reactivación económica de estos emprendimientos liderados por uno de los sectores más vulnerables, el de las mujeres.

Dos de estos pilares tienen que ver con el acceso al financiamiento y capital, y acceso a mercados y redes empresariales que las mujeres consideran muy importantes para sus iniciativas.

“Hemos visto una crisis en el sector porque muchas de las mujeres han perdido su capital, su inversión, y han tenido que despedir trabajadores. Se han limitado sus acciones por el hecho de que el Covid-19 ha limitado sus ventas en el mercado y ha sido un golpe muy fuerte para la micro, pequeña y mediana empresa liderada por mujeres”, señala Mónica Chuquimia, coordinadora nacional del CEEB, que se encarga de socializar esta agenda junto con su directiva y voceras en todo el país.

Para Chuquimia, el acceso al financiamiento de mujeres se encuentra limitado por varios factores: conocimiento, características del crédito y porque no existen muchos instrumentos financieros a los que las emprendedoras de micro, pequeñas y medianas empresas puedan acceder.

“El único que tenemos es el crédito y está limitado por garantías en este momento cuando un sector ha perdido su capital rentable y no ha tenido ventas no va a acceder al sistema financiero”, señala.





Insiste en que se debe pensar que en este momento una micro y mediana empresa que ha perdido su capital y que tenga que generar un crédito en un futuro va a ser un riesgo para el desarrollo de la empresa. Por eso al comité le preocupa trabajar en poder dar el acceso al financiamiento a las mujeres.

Respecto al segundo pilar, que corresponde al acceso a mercados y redes empresariales, explica que está dirigido a poder fortalecer la industria boliviana, protegerla y promoverla en todo el país, ya que se ha incrementado la importación de productos y esto está afectando directamente al sector. “Después de la pandemia se debe promover a que la micro, pequeña y mediana empresa pueda acceder a mercados internacionales y responder a su demanda. Bolivia tiene productos y servicios con buena calidad y una mano de obra admirables”, destaca la coordinadora del comité.

Sobre estos puntos de la agenda, Patricia Hurtado, directora del Grupo Empresarial La Fuente, piensa que la equidad de género en la empresa y el acceso de mujeres al capital y al mundo laboral pasan mucho más por un cambio de mentalidad. Por entender que la participación de la mujer en la economía ya es un tema de justicia de género, de rentabilidad empresarial. Asegura que el cambio se va a dar cuando las mujeres estén sentadas en la mesa directiva donde se toman las decisiones.

Hurtado cita el estudio del BID que dice que si la mujer se inserta en el mercado laboral, se reduce el 34% de la pobreza en América Latina y el Caribe. “Cuando las mujeres trabajan, los ingresos los destinan a educación de los hijos, comida, ropa y alimentos. Todas las mujeres que trabajan gastan su plata en su familia. El hecho de que las mujeres trabajen tiene que ver con la lucha contra la pobreza”.

Sobre el acceso al capital, asegura que el problema para acceder a un financiamiento es que la mayoría de las mujeres trabaja en la informalidad. “Las mujeres tienen trabajos que son de sobrevivencia, se autoemplean, y el acceso al financiamiento en este país está restringido a los formales”.

Señala que cuando una persona quiere sacar un crédito debe presentar un certificado de trabajo, tiene que presentar su certificado de la AFP o si es emprendedora tiene que demostrar que tiene Fundempresa, NIT.

Plantea que hay que generar mejores condiciones para que las mujeres trabajen con calidad de empleo porque en este momento la informalidad está dando un empleo muy precario.

En el aspecto de acceso a mercados y redes empresariales, Hurtado lo considera superimportante porque las redes representan conexión y constituyen comunidad, que implica dar y recibir.

El acceso a mercados es importante para que las emprendedoras crezcan, porque nuestro mercado interno es pequeño y vivimos en un mundo global donde cualquier política pública que incentive la conectividad para poder vender servicios o productos es clave para todo el mundo y no solo para las mujeres.

Para Amelia Solórzano, empresaria y propietaria de la marca de ropa deportiva Patra, más importante que otorgar financiamiento y capital es volver a los emprendedores competitivos, capacitarlos y darles las herramientas para que ellos busquen y logren una independencia económica y financiera.

En el punto de acceso a mercados coincide en su importancia junto con las otras empresarias porque lo considera importante debido a que “si uno produce y no tiene mercado, no vende”.

Asegura que en los años que lleva como empresaria no ha visto programas sólidos en Bolivia que generen mercados para las emprendedoras.

“Por ejemplo, en Brasil hacen ferias por estados y detectan potenciales compradores en otros países y los invitan, incluso con todo pagado, para que ellos puedan ir y conocer el potencial productivo de ese estado y de esa forma incentivar la exportación”, señaló la empresaria.

La idea del CEEB es que en los primeros cinco años se fomenten los cuatro primeros pilares de la agenda: acceso al financiamiento y capital, acceso a mercados y redes empresariales, promover un entorno favorable para generar negocios y democratización del trabajo del cuidado, y a largo plazo completar con los seis restantes: educación y acceso a la información, uso de tecnologías de información y comunicación, generación de información sobre la dinámica emprendedora con visión de género.

Asimismo, promueven que se debe fortalecer el liderazgo de mujeres en los sectores económico y político, participación paritaria de mujeres en los ámbitos de decisión y eliminar la discriminación y segregación ocupacional y las brechas salariales de género.




Tags