Renzo Rossi, líder del Programa de Equidad de Género de Credicorp, conversó con Dinero sobre la inclusión financiera en Bolivia. Dice que aunque la brecha de género es mínima, hay mucho trabajo por hacer

26 de abril de 2022, 7:27 AM
26 de abril de 2022, 7:27 AM


Recientemente, Renzo Rossi, líder del Programa de Equidad de Género de Credicorp, conversó con Dinero sobre el Índice de Inclusión Financiera del grupo. Un trabajo que recabó datos de siete países: Bolivia, Chile, Colombia, Ecuador, México, Panamá y Perú. En términos generales, el país presenta una corta brecha de género en lo que a inclusión financiera se refiere. En lo que respecta a la diferencia entre la ciudad y el área rural, esta es mayor. 

_ Según el trabajo que hicieron, ¿qué factores son los que influyen para que Bolivia se encuentre en un segundo nivel en lo que a inclusión financiera se refiere?
Primero debemos explicar las dimensiones de la encuesta. Se pregunta a través de tres dimensiones: acceso, uso y calidad percibida. La primera tiene relación con el acceso a los productos o servicios financieros. La segunda tiene que ver con qué tanto se usan esos productos o servicios. La última es qué tanto se confía en las entidades financieras de tu país.
Chile y Panamá, en general, con respecto a las demás realidades tienen, primero, niveles mucho más altos de inclusión financiera en un nivel logrado, básicamente, por la infraestructura de pagos y el desarrollo en canales digitales. Además, tienen un alto nivel de educación financiera, hay más lugares que tienen disponible el POS para pagar con tarjeta o un QR para pagar con el celular. Esto no es de igual manera en Colombia, Perú, Bolivia y México. Teniendo esto en cuenta, diría que son dos factores: educación financiera y la infraestructura y los canales de uso. 

_La pandemia aceleró la digitalización de prácticamente todas las industrias ¿cómo incidirá ello en la inclusión financiera en el mediano plazo?
Bolivia presenta indicadores positivos. Es el único de los siete países encuestados, que presenta una brecha de género más pequeña que los demás. En términos estadísticos esto es algo positivo y tienen algo ganado con relación a los demás países. En Ecuador, por ejemplo, la diferencia es de 14 puntos. En Bolivia hablamos de dos o tres. Los hombres están en alrededor del 15%, incluidos financieramente en el nivel óptimo, mientras que las mujeres se encuentran en alrededor del 12%. En términos generales, Bolivia con esta virtud de poca diferencia entre hombre y mujeres, presenta un escenario positivo para equiparar las oportunidades para ambos géneros.
Bolivia presenta muchos micromercados en los que el uso del efectivo se impone. En este contexto, la educación financiera es un elemento que se debe desarrollar. A la par, se necesita de infraestructura; es decir, medios de pago a través de los cuales las personas pueden realizar sus transacciones. Si se juntan estas dos cosas creo que en el futuro existirá una gran oportunidad de digitalizar más servicios y necesidades de las personas. Con esto, los porcentajes de inclusión financiera serán mayores. 

_A pesar de que Bolivia, en términos generales presenta una brecha de género menor que otros países, si nos enfocamos en los datos del área rural el porcentaje es mayor, ¿cómo se tiene que encarar esa situación?
En Bolivia estamos hablando del 39% en el área urbana versus un 23% en el área rural. Tenemos una distancia importante que creo yo, que no es de la noche a la mañana que vamos a cubrir ese ‘gap’, pero sí educada y disciplinadamente podemos a llegar a cerrarlo muy fácilmente si nos atrevemos a invertir y apostamos por estos lugares que no tienen acceso hoy en día.

_¿Qué impacto genera la digitalización de los clientes?
Uno de los mejores ejemplos que existen para responder esa pregunta, es lo que ocurrió en Dubái en los años 90. Todo era tierra. Cuando se empieza a desarrollar la ciudad en pleno desierto, las entidades financieras jugaron un rol fundamental, porque fueron las que financiaron todas las obras y construyeron las infraestructuras de pago digital que hoy en día son la cosa más común de Dubái.
En Perú ocurrió algo similar en un lugar llamado Jicamarca. Hace unos años solo había una iglesia, una comisaría y casas alrededor. Empezaron a ingresar los servicios financieros a través de los cajeros corresponsales y en cinco o seis años ya hay colegios, farmacias, restaurantes, entro otros negocios. Los servicios financieros permiten que los emprendedores puedan invertir y generen desarrollo. Esto en microfinanzas se denomina la espiral del progreso. Se empieza pequeño y luego se va agrandando poco a poco hasta tener un gran negocio desarrollado. 

_¿Qué acciones llevarán a cabo en el mediano plazo para cerrar la brecha de inclusión financiera en Bolivia?
Dentro de la estrategia de sostenibilidad de Credicorp, tenemos el propósito de poder brindar el mayor valor a cada uno de nuestros grupos de interés en cada uno de los países en los que tenemos presencia. También tenemos anidado el objetivo de brindar igualdad de oportunidades a todas las personas, como lo venimos haciendo en Bolivia desde hace 27 años.