La gerente de Productos Derivados de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Gabriela Delgadillo, afirmó que cuentan con tres navíos a la espera de desembarcar combustibles en Arica.

24 de julio de 2024, 18:05 PM
24 de julio de 2024, 18:05 PM

La crisis energética que enfrenta Bolivia encuentra un nuevo capítulo con la llegada de varios buques petroleros rusos al puerto chileno de Arica. Estos buques transportan diésel destinado a aliviar el desabastecimiento que sufre el país, provocado por problemas logísticos en la región.

Uno de estos barcos, el Zeynep, proveniente de Rusia, ya se encuentra en aguas chilenas a la espera de condiciones climáticas favorables para descargar su carga. Otros dos petroleros, el Seaways Galle y el Byzantion, también se encuentran en la zona, según dio cuenta el sitio de seguimiento MarineTraffic.

La decisión de recurrir al mercado ruso se produce en un contexto de sanciones internacionales a Moscú y de búsqueda de nuevos mercados por parte de este país. Bolivia, por su parte, busca diversificar sus proveedores de energía ante las dificultades para importar combustibles por vías tradicionales.

La nave tiene 184 metros de eslora, 27 metros de manga y estaría cargada con 33 mil toneladas métricas de diésel, de acuerdo con lo consignado por Reuters en base a información de London Stock Exchange Group (LSEG), un proveedor global de datos de mercados financieros.

La gerente de Productos Derivados de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Gabriela Delgadillo,  afirmó que cuentan con tres navíos a la espera de poder desembarcar combustibles en Arica.

Uno de estos es el Zeynep, mientras que las restantes dos naves son los petroleros Seaways Galle y Byzantion. El primero arribó procedente de Houston, Estados Unidos, mientras que el segundo no cuenta con registros vinculados a Rusia.

A su vez, en el sitio portalportal.com se informó que otro petrolero, el Sino Feith, se dirige a Chile con carga rusa para el mercado boliviano. La motonave embarcó 42 mil toneladas de diésel en el puerto báltico de Vysotsk, Rusia, y en su trayecto descargó parte de su carga en el recinto portuario de Paranaguá, Brasil, desde donde zarpó rumbo a Arica.

El último registro de movimiento del Sino Feith que figura en MarineTraffic -a la fecha- sitúa al petrolero en aguas de la Región de Los Lagos con curso fijado hacia el norte del Chile. Se estima que el barco llegue a Arica el día domingo 28 de julio.


Un despacho envuelto en polémica

 Bolivia atraviesa un periodo de desabastecimiento de combustibles, atribuido a problemas logísticos en el puerto chileno de Arica por la presencia de oleaje y en la hidrovía Paraguay-Paraná por los bajos niveles de agua.

Sin embargo, la situación no está exenta de polémica. A pesar de los anuncios oficiales sobre la llegada de cargamentos rusos, han surgido discrepancias entre diferentes autoridades bolivianas sobre la existencia de un acuerdo formal con Rusia para la compra de petróleo.

Hace un mes, el presidente de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Armin Dorgathen, negó que exista un acuerdo de Bolivia con Rusia para la compra de crudo, y descartó que un buque con diésel hubiera llegado a puertos chilenos con combustible para el mercado boliviano, como informaron diversos medios.

Sin embargo, la llegada de estos petroleros rusos representa una esperanza para aliviar la crisis energética en Bolivia porque ya se observan filas de vehículos en varias ciudades del país. Aunque, la sostenibilidad de esta solución a largo plazo dependerá de diversos factores, como la evolución de las relaciones comerciales entre Rusia y América Latina y la capacidad de Bolivia para diversificar sus fuentes de energía.