Un informe del PNUD advierte que cada nueve minutos muere un niño de menos de 5 años debido al conflicto, y proyecta un empeoramiento de la situación si los combates no cesan.

23 de noviembre de 2021, 20:41 PM
23 de noviembre de 2021, 20:41 PM

Un informe de Naciones Unidas publicado este martes asegura que a fines de 2021 unas 377.000 personas habrán muerto en Yemen desde que comenzó el conflicto que azota ese país, en 2014. La mayoría de las muertes, en torno al 60 por ciento, se debe a consecuencias indirectas del conflicto, como la falta de agua potable, el hambre y las enfermedades, agrega el documento del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).

Siete años de guerra han tenido "efectos catastróficos sobre el desarrollo de la nación", según el PNUD, que añade que "el acceso a la atención de la salud es limitado o inexistente" y que "la economía está al borde del colapso". La mayoría de las víctimas indirectas son "niños especialmente vulnerables a la malnutrición e inclusive a la desnutrición", indica el organismo. "En 2021, un niño yemení menor de cinco años muere cada nueve minutos debido al conflicto", afirma.

El informe señala que este 60 por ciento de muertes fuera del frente de combate podría llegar al 75 por ciento si en 2030 la guerra aún no termina, y proyecta que, en tal caso, el total de muertes podría llegar a 1,3 millones. Además, el número de personas desnutridas habrá subido a 9,2 millones (frente a los 4,9 millones de hoy), y la extrema pobreza afectará ya al 65 por ciento de la población.

Si acabara la guerra, todo cambiaría

"Una proporción cada vez mayor de esas muertes se producirá debido a las consecuencias indirectas de la crisis para los medios de subsistencia, los precios de los alimentos y el deterioro de los servicios básicos, como la salud y la educación", explica. La escalada de los combates, incluidas las batallas de tanques y los bombardeos regulares por aviones y drones, ha destruido en algunas zonas las infraestructuras más elementales, prosigue el informe.

"Yemen es la peor y más grande catástrofe humanitaria del mundo, y esta catástrofe continúa agravándose”, subraya la ONU. "Más del 80 por ciento de la población necesita ayuda humanitaria”, agrega. Pero el informe del PNUD trata de no ser demasiado pesimista, y calcula que si la guerra terminara hoy, el país podría acabar con la extrema pobreza en una generación, para el año 2047.

El reporte fue elaborado por el Centro Frederick S. Pardee para el Porvenir Internacional de la Universidad de Denver, y es el tercero que elabora sobre los impactos de la guerra en Yemen.